La cultura china tiene textos que se presentan como una puerta de entrada a ese mundo milenario, y en su cuarta visita a la Argentina la compañía de danza clásica china Shen Yun presenta El rey mono, una travesía en la que un monje es enviado por el emperador a recuperar textos sagrados a la India para devolverlos a su lugar de origen, acompañado por unos personajes bastante peculiares. “Lo que cuenta esta historia es un viaje de cultivación, de transformación personal, pero con un destino muy valioso para un pueblo entero”, sostiene a Página/12 Meilin Klemann, la presentadora de la compañía en Latinoamérica y parte de la asociación Falun Dafa. “Este viaje es muy largo, con muchas dificultades, pero la búsqueda es lograr algo muy valioso para China: recuperar escrituras espirituales que van a difundirse en el país. Es una misión muy importante para todo el pueblo, y con perseverancia todo puede lograrse”, interpreta Klemann.

La obra está basada en la novela Viaje al Oeste, uno de los cuatro clásicos de la literatura china, que representan distintos acontecimientos históricos convertidos en leyendas mitológicas. El texto original fue escrito a finales del siglo XVI y cuenta la historia de Xuan Zang, un monje que en el año 627, durante la dinastía Tang, fue enviado a la India a recuperar las escrituras budistas. Tardó diecisiete años en completar la travesía, pero volvió a China con 1300 rollos sagrados, y pasó el resto de su vida traduciéndolos. En la novela, para lograr su objetivo recibe la ayuda de tres personajes mitológicos, deidades que cayeron a la Tierra por mal comportamiento en los cielos y que deben redimirse a través de esta búsqueda espiritual de transformación personal para recuperar su lugar sagrado: el hombre-cerdo Zhu Bajie, el ogro Sha y el Rey Mono. Lo espiritual ocupa un lugar muy importante en la cultura china. Y esa importancia está representada en El rey mono: el viaje puede ser, también, una forma de búsqueda espiritual, una manera de recuperar valores tradicionales de esa cultura: lealtad, benevolencia, perseverancia, tolerancia. De hecho, los tres ayudantes del monje viven esa transformación en los distintos actos, desde el comienzo del viaje y la explicación de cómo surgió el rey mono hasta el regreso del equipo y la difusión de las enseñanzas de las escrituras sagradas. Klemann explica que en los cielos hay muchas divinidades, que durante miles de años “bajaron a la tierra para impartir su cultura”. Entonces, “la cultura china considera que su origen está en los cielos. Todo proviene de un lugar celestial. Pero acá en la tierra somos seres humanos y tenemos que despertar, saber por qué estamos acá y mejorar. En los cielos es difícil mejorar”, compara, “pero acá hay mucho para hacer y así podremos recuperar nuestro lugar en los cielos”, apuesta la presentadora.

Los anteriores espectáculos de la compañía, dice Klemann, eran un recorrido por los 5000 años de cultura china, y esta es la primera vez que crean uno basado en una sola historia. En esta puesta, hay 33 bailarines en escena, que tienen entre 15 y 33 años, con vestuarios creados para la obra y una pantalla sobre la que se proyectan los paisajes de lo que era la China del siglo VII.

La compañía de danza Shen Yun fue fundada en el 2006 en Nueva York por un grupo de coreógrafos, músicos y bailarines enfrentados al gobierno chino con el objetivo de “revivir la auténtica cultura china”, porque sostienen que estas tradiciones son olvidadas por las autoridades de su país. Para ello, crea un espectáculo nuevo por año, y con él salen de gira sus compañías por todo el mundo, con bailarines y músicos de origen chino de más de diez países. “No había mucha gente formada en la danza o la música clásica china, y fundaron esta academia para formar para el futuro”, avala Klemann. Shen Yun comenzó en Nueva York con una sola compañía de danza, y ya hay cinco elencos con sus orquestas que viajan por todo el mundo llevando estas creaciones.

* El rey mono se presenta en el teatro Opera (Av. Corrientes 860) hoy a las 21 y mañana a las 15.30.