La Gioconda del Museo del Prado fue presentada ayer en sociedad, después de que un estudio técnico y un proceso de restauración revelaron que se trata de la copia más antigua y de la versión más importante que se conoce del famoso retrato de Leonardo Da Vinci. Ahora la sala quedó pequeña para albergar a todos los que se acercaron al museo para verla antes de que el 13 de marzo emprenda viaje a París para participar en una exposición temporal del Louvre dedicada a Da Vinci. La pintura estaba considerada una copia más entre tantas que atesora el Louvre. Y figuraba oficialmente como una antigua anónima del siglo XVI. Pero hace dos años, un equipo del museo inició un estudio técnico del cuadro para poder restaurarlo.