El humorista gráfico Joaquín Salvador Lavado, más conocido como Quino, fue ovacionado ayer en el Teatro Campoamor de la ciudad de Oviedo (España), cuando subió al escenario para recibir el Premio Príncipe de Asturias en Comunicación y Humanidades. Junto a Quino, convertido en el primer dibujante de la historia que recibe esta distinción, los ganadores en esta edición fueron el arquitecto estadounidense Frank Owen Gehry (Arquitectura); el escritor irlandés John Banville (Artes); los químicos Avelino Corma, Mark E. David y Galen D. Stucky (Investigación); el historiador francés Joseph Prez (Ciencias Sociales) y la periodista congoleña Caddy Adzuba (Concordia). El galardón está dotado con una escultura diseñada por Joan Mir, 50 mil euros y un diploma.

Los reyes Felipe VI y Letizia presidieron la ceremonia del premio que el año próximo se llamará Princesa de Asturias y que será entregado por la renombrada Fundación Princesa de Asturias. “Es la primera vez que nuestros galardones reconocen a un dibujante y lo hacen premiando la obra de un hombre que trabaja, según él afirma, para que el mundo vaya del lado de los buenos”, aseguró Felipe VI. “Su obra nos recuerda a los españoles, y a cualquier persona de cualquier sociedad, la necesidad de guiarnos siempre por los mejores y más sólidos principios y valores y de hacerlo con un sentimiento genuino de profunda humanidad”, agregó. “Hijo de padres andaluces, exiliados en Argentina, también él ha conocido después el exilio. Con todo ello, ha sabido imbuir a sus personajes de una admirable capacidad para transmitir valores educativos universales, como universal es la admiración y el cariño por sus viñetas y sus dibujos geniales”, sostuvo en su discurso el rey, quien además destacó la “mirada aguda e intuitiva de Mafalda”.

Por su parte, el jurado del premio también tuvo palabras elogiosas para el autor de Mafalda: “La obra de Quino conlleva un enorme valor educativo y ha sido traducida a numerosos idiomas, lo que revela su dimensión universal. Sus personajes trascienden cualquier geografía, edad y condición social”. El reconocimiento se produce en el marco de una serie de homenajes que el dibujante mendocino de 82 años recibió este año al cumplirse 50 años de la primera aparición de Mafalda, al tiempo que recibió la Legión de Honor de parte del gobierno de Francia. Al inaugurar, en abril, la 40ª edición de la Feria del Libro de Buenos Aires, Quino se definió, con su habitual timidez, como un “dibujante político” y se mostró sorprendido por la actualidad de los temas de su obra, aunque consideró que “el mundo repite siempre los mismos errores”. “A partir de hoy me voy a tener un respeto increíble”, había sostenido irónicamente en esa oportunidad, acompañado por los periodistas Cristina Mucci y Carlos Ulanovsky, quienes lo entrevistaron. Gracias a la historia de Mafalda, una nena rebelde que cuestionaba la realidad con una mirada provocadora, Quino alcanzó la fama internacional. La tira se publicó por primera vez el 29 de septiembre de 1964, en la revista semanal Primera Plana. Traducida a 30 idiomas y con más de 20 millones de ejemplares vendidos en Argentina, fue publicada también en el diario El Mundo y en el semanario Siete Días Ilustrados, hasta junio de 1973. La universalidad del discurso de Mafalda, que expresaba verdades y críticas, hizo que miles de lectores argentinos y de otras partes del mundo se identificaran con la historieta.