Cuando se habla de historieta, nadie puede discutir que se trata de un lenguaje popular. Por lo menos, lo es en esencia. Tampoco se puede negar que en la última década la historieta local tomó envión y comenzó a recuperar el terreno perdido en los sombríos ‘90. Pero lo que sin duda falta son políticas de difusión: muchas veces se la considera un arte menor y no recibe el incentivo estatal que tienen otras artes, como el cine, el teatro o la música. Se desconoce, por ejemplo, que en el país conviven estéticas y temáticas para públicos de todas las edades y gustos. Por eso, la octava edición de Animate, una megaconvención de historieta, animación y videojuegos, abrirá hoy sus puertas (a partir de las 16) para evidenciar la diversidad que existe en el mundillo del comic local. “El objetivo es que el que vaya salga con un panorama más amplio y que sepa que la historieta es un lenguaje como cualquiera, como la narrativa o el cine. No hay ningún francés o japonés que dude que la historieta puede ser para grandes, adolescentes, chicos, y para quienes gustan de la política, la aventura, el humor o el drama”, considera Pablo Muñoz, organizador de la muestra que este año se mudará al Centro de Exposiciones Miguelete (Av. General Paz y 25 de Mayo, San Martín). A modo de incentivo, hoy la entrada será gratuita; a partir de mañana y hasta el domingo la muestra estará abierta de 11 a 20.

Uno de los puntos altos de este año será una muestra de Historietas por la Identidad (HxI), un proyecto ideado por Madres de Plaza de Mayo, cuyo eje es el mismo que Televisión o Teatro por la Identidad: ejercitar la memoria y aportar un granito de arena para encontrar a los nietos y nietas que aún no conocen su verdadera identidad. De esta manera, guionistas y dibujantes, apoyados en testimonio de familiares de desaparecidos, reconstruyen con recursos gráficos –incluso con fotografías– las historias de quienes más padecieron el terrorismo de Estado. “En vez de orientarlo a partir de testimonios de las Abuelas, lo hicieron del lado de los hermanos y primos de esos nietos. Esto muestra que la causa no tiene que quedar ni morir con las Abuelas, sino que tiene que continuar con las siguientes generaciones”, destaca Muñoz.

En las paredes colgarán treinta trabajos con variadas técnicas y estilos. Dos de ellos serán la historieta de Matías Trillo (que cuenta la historia de los militantes del ERP Ana María Lanzillotto y Domingo Menna), quien se sirvió del collage y el arte digital. Y otra será una historieta en blanco y negro a cargo del dibujante y guionista Salvador Sanz, que reconstruye la historia de los rosarinos Isabel y Víctor Hugo. Ambas fueron publicadas por las páginas de la revista Fierro que edita este diario. Hoy a las 18.30 será la presentación de la muestra con una mesa redonda que reunirá a algunos de sus protagonistas. “Cuando les ofrecí exponer en Animate, les pareció una buena idea difundir estas historietas en un ámbito distinto al habitual –cuenta el organizador–. Es que la feria tiene un público muy heterogéneo entre el que se encuentran jóvenes, familias y coleccionistas.”

Pero ésa no será la única riqueza de Animate 2011: además de autores internacionales –como los ilustradores brasileños Renato Guedes y Rafael Albuquerque–, hoy se espera la visita del legendario dibujante Manuel García Ferré, quizás el autor más representativo de la animación en el país. Una gran excusa trae al creador de Anteojito a la feria: se presentará una muestra titulada Hijitus versus los héroes y villanos más famosos del mundo en donde más de setenta dibujantes argentinos realizarán versiones libres del “héroe argentino” contra otros famosos personajes de la historieta mundial. “Dibujó la mitad del arco de autores de la Argentina actual”, se entusiasma Muñoz. “Hijitus es un personaje que atraviesa tres generaciones, por lo menos. Es el superhéroe argentino, más allá de que es un personaje infantil y humorístico”, reconoce. Además, habrá merchandising de todas las épocas.

Según destaca el organizador, en la feria hay lugar para propuestas destinadas “a diferentes públicos e incluye desde lo más comercial, como puede ser el merchandising y el coleccionismo, como lo más cultural, es decir, la obra de los autores”, muchos de los cuales son autoeditados. Como cada año participarán con stands editoriales, librerías especializadas, escuelas de dibujos y efectos especiales, y habrá charlas, proyecciones (se destaca la de Plaga Zombie 3, el domingo), videojuegos, exposición de originales y los clásicos concursos de disfraces (la programación se puede consultar en www.deuxstudio. com.ar/ani mate). La intención, claro, es promover un arte que tiene historia y peso en el país, y es un pilar fundamental de la cultura argentina. “Hay libros y originales que son maravillosos tanto en Argentina como en el mundo, pero que son difíciles de vender acá porque no está unida la relación historieta con una amplitud temática; es decir, que puede llegar a interesarle a un tipo de setenta como un pibe de doce.” Un gran paso, entiende Muñoz, es acercar la historieta a los niños: “Quien conoce desde niño el mundo de las viñetas, difícilmente las abandone de grande. El objetivo actual es que termine de despegar del nicho, del gueto”.