Alberto Vacarezza escribió más de un centenar de obras, pero su prestigio no estuvo, en su momento, a la altura de su popularidad. La investigación teatral tardaría años en reconocerlo, pero la historia del espectáculo argentino acredita datos insoslayables. Por ejemplo, la pieza El conventillo de la Paloma tuvo mil representaciones consecutivas en apenas un año. Notable cultor del sainete porteño, supo también destacarse en el drama nativista. En ocasión del cincuentenario de su muerte, el sello Colihue acaba de publicar, en el marco de su colección de rescate de clásicos teatrales, Juancito de la Ribera y otros textos. El volumen incluye tres de los mejores sainetes del autor: Juancito de la Ribera (1927), Cuando un pobre se divierte (1921) y La comparsa se despide...(1932); y dos de sus piezas rurales: el drama Los cardales (1913) y la tragedia La casa de los Batallán (1917). La edición restituye los textos originales y suma un estudio a cargo del crítico e investigador Jorge Dubatti.