A Bono no le tocó un buen día para visitar a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff: anteayer, en Río de Janeiro ocurrió el asesinato de doce niños y adolescentes como resultado de un tiroteo en una escuela, a manos de un ex alumno de ese centro de estudios. “Es un día muy triste para Brasil”, expresó el cantante de U2 sobre este tema, que acabó siendo central en su reunión con la mandataria. El encuentro tuvo lugar en el Palacio de la Alvorada, la residencia oficial del presidente de Brasil, que Bono ya conocía de su anterior visita, cuando en 2006 visitó a Luiz Inácio Lula da Silva. El cantante y Dilma charlaron sobre los programas estatales para combatir la pobreza, sobre los planes de control de la violencia y sobre los aspectos culturales de la gestión de Rousseff. U2 tocará en Brasil esta noche, el domingo y el miércoles, siempre en el estadio Morumbí de San Pablo.