¿Llega a buen puerto el affaire Lugones? Así parecería, ocho meses más tarde de lo originalmente pautado y tras innumerables presiones de particulares afectados, páginas de Internet y firmas de notables, en pos de que la sala reabriera de una buena vez. En noviembre de 2013 el ministro de Cultura de la Ciudad, Hernán Lombardi, había informado que como parte del plan de refacción del Teatro San Martín, la sala Leopoldo Lugones, ubicada en el décimo piso de ese teatro, permanecería cerrada de marzo a julio de 2014, por arreglos técnicos y edilicios. En agosto se descubrió que las obras ni siquiera se habían iniciado, dando comienzo a partir de entonces una intensa campaña de petitorios y reclamos, tanto de forma particular como por medio de una página de Facebook creada a tal efecto, llamada “Reabran la Lugones”. La presión pública dio por resultado que las obras empezaran un tiempo más tarde. A fines de 2014 surgió una nueva alarma: las autoridades no contestaban si la refacción incluiría la instalación de un proyector digital (DCP), indispensable en tiempos en que ya casi no se produce más cine en celuloide. Una nueva presentación ante el Cultura de la Ciudad fue respondida por carta membretada, el viernes pasado. Alberto Ligaluppi, director general del Complejo Teatral de la Ciudad de Buenos Aires, del cual forma parte el Teatro General San Martín, afirma allí que la sala Leopoldo Lugones contará, al momento de su reapertura, con un proyector digital DCP de última generación. Lo que no figura en el escrito es la fecha de reapertura, con lo cual el affaire no parece cerrado del todo.