El ministro de Justicia de Polonia, Zbigniew Ziobro, decidió apelar el fallo del tribunal de Cracovia que, en octubre del año pasado, decidió no extraditar al cineasta polaco Roman Polanski a Estados Unidos, país donde se le reclama por el abuso a una menor. El director de películas como El Pianista y Chinatown, entre otras, fue acusado de mantener relaciones sexuales con Samantha Geimer en 1977, cuando ésta tenía solo13 años, tras una sesión fotográfica de la que participaron en Los Ángeles. Polanski, que tenía 43 años en ese momento, se declaró culpable de acoso sexual sobre la menor, pero logró evitar un juicio tras pasar unos días en la cárcel. Al año siguiente huyó de EE.UU. por temor a que le impusieran una dura condena, y se estableció en Francia. En 2009, lo detuvieron en Suiza por una orden de arresto emitida por la justicia norteamericana, y pasó nueves meses en arresto domiciliario. El octubre pasado, mientras el prestigioso y controvertido cineasta se encontraba en Cracovia preparando un rodaje, Estados Unidos solicitó su extradición y tras un largo juicio el tribunal polaco rechazó la solicitud. Posteriormente la fiscalía renunció a apelar la decisión judicial, lo que en principio parecía que daba por cerrado el proceso. Sin embargo, el caso volvió a abrirse ayer con la apelación formal presentada por Ziobro, quien manifestó que “Todo el mundo debe ser tratado de la misma manera frente a la ley”.