El cantante Tito Reyes, de 79 años, una de las voces emblemáticas de la orquesta de Aníbal Troilo, falleció ayer a causa de problemas pulmonares que lo tuvieron internado en las últimas semanas. Nacido como Tito Sconza y también cultor de la poesía tanguera, Reyes fue un intérprete de marcada personalidad, con un caudal de voz potente y varonil. Además de su reconocido paso durante once años por la típica de “Pichuco”, donde fue el vocalista de algunas de las últimas grabaciones del conjunto, Reyes mantuvo una dispar actividad en solitario que, en buena medida, dedicó a los tangos camperos. La vocación de Litto Nebbia por rescatar valores olvidados le permitió –durante los ’90– registrar algunos álbumes para el sello Melopea, donde volcó una vez más el arrabal que anidaba en su poderosa garganta. Ese regreso con reconocimiento a las lides musicales le posibilitó ser laureado, en 2005, por la Comisión de Cultura de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires con un acto en el que cantó acompañado por el bandoneonista Ernesto Baffa y por el guitarrista Rubén Castro.