Canciones de despedida y de encuentro. Canciones de “desapego y error”. Canciones de principio y final. Las composiciones de Ainda Dúo se abren paso y piden oídos atentos en medio del ruido de la ciudad. La joven dupla integrada por Esmeralda Escalante y Yago Escrivá está presentando Segundo (2015), un trabajo en el que muestran una decena de canciones maduras, cálidas y luminosas. En su primer disco, Uno (2013), habían visitado a autores como María Elena Walsh y Eduardo Mateo, apoyados solo por guitarras acústicas y sus voces. Pero la cosa mutó en el nuevo disco. “Creció en volumen, ritmo y textura. El sonido cambió bastante, pero nos dimos cuenta durante el proceso de grabación. La primera parte la hicimos a dúo y recién después se empezaron a sumar los músicos amigos (que aportaron cellos, violines, clarinetes, guitarras de 12 cuerdas, además de la eléctrica y la acústica)”, cuenta Escalante. “El disco por momentos se pone orquestal, pero mantiene la intimidad. El primero era recontra minimalista y fiel a lo que era vernos tocar en vivo. Pero en el nuevo hicimos lo contrario: lo que pintó en el estudio y después vemos cómo lo adaptamos al vivo. Nos dimos más libertad, hubo más juego y además la mayoría de las canciones son nuestras”, cierra. Recién llegados de una extensa gira por el sur del país, la próxima presentación será el 1º de abril a las 21 en el CAFF, Sánchez de Bustamante 764.

Entre los “amigos” que sumaron su parte se encuentran Pedro Rossi, quien hizo de las suyas con la guitarra de siete cuerdas en “Viajar”. Y se destaca la particular voz de Lucio Mantel en “Llorando fuerte”, una bellísima canción compuesta por el pianista Guillermo Klein. “La voz de Lucio en el disco es una ráfaga de aire nuevo”, se alegra Escalante, quien también consigue un original trabajo vocal junto a Escrivá. Después de un paso frustrado por la UCA, ambos tomaron clases de composición y armonía con Klein. “La UCA era otro palo, una cosa mucho más académica, muy teórica. Nos alejaba mucho de la música. Guille fue un maestro impresionante. Es muy completo, a cada alumno le encontraba la vuelta”, dice ella. Si bien en Segundo el silencio ocupa un lugar importante, la ciudad no deja de estar presente. “Siempre nos vinculan con una música más ‘natural’, pero somos muy urbanos. Nos fumamos el tráfico, los bondis, el ruido de la ciudad”, describe. Entre las preferencias musicales, aparecen The Beatles, Charly García, Caetano Veloso y Jorge Drexler. “El reggae también nos gusta mucho”, dice.

La presentación oficial del disco fue a fines del año pasado en la Sala Argentina del Centro Cultural Kirchner (CCK), cuya reapertura hoy es un interrogante. Lo cierto es que los músicos que pasaron por allí se llevaron las mejores impresiones. “Fue un regalo, mucho más de lo que nos hubiéramos imaginado, sobre todo a tan corto plazo... ¡Y la sala estuvo llena!”, recuerda con alegría Escalante. “El trato humano de los que trabajaban ahí era espectacular, no había diferencia entre un Fito Páez y Ainda Dúo”, resalta. “Me parece una lástima que hayan despedido a tantas personas, porque había gente muy buena trabajando. Si te movías más o menos en el circuito musical del under, conocías a muchos de ellos porque venían laburando desde hace rato en otros espacios; era gente muy pujante con ganas de hacer y dar lugar a músicos nuevos. Eso es lo más rescatable: ampliar la agenda de músicos. Hay gente muy talentosa que vale la pena conocer y a veces lo que falta es la mano para impulsar y producir, y me parece que desde el Estado hicieron muy bien ese trabajo.”