La Justicia mexicana condenó al cantante Luis Miguel, al compositor español Juan Carlos Calderón y la compañía discográfica Warner Music a pagar un resarcimiento de 16 millones de dólares por haber plagiado una canción, aunque el monto exacto debe ser fijado en una etapa posterior. Un tribunal civil condenó a Calderón, a Warner Music y a Luis Miguel Gallego Basteri, nombre del cantante, a pagar la compensación a Marcos Lifshitz, el querellante. Lifshitz acusó a Calderón de plagiar su canción “Siento nuestro aliento”, publicada como “Amarte es un placer” e interpretada por Luis Miguel. Lifshitz registró su canción en marzo de 1997 en México y en 1999 la presentó a directivos de Warner, pero luego se enteró de que una canción muy parecida había sido grabada por Luis Miguel y atribuida a Calderón. Las partes tienen 15 días para intentar una negociación o en su caso entablar un amparo que duraría de tres a seis meses y sería la última instancia. “El disco se puso a la venta en 135 pesos y calculamos que se habrán vendido tres millones de copias: con base en eso se haría el cálculo”, argumentó Lifshitz.