Desde Nueva York

Existe una presión redoblada para tanques como Toy Story 3, que se estrenará próximamente.

Uno de los fines de semana más esperados en Hollywood terminó en algo parecido al fiasco. Las ventas de tickets para Sex and the City 2 se estancaron luego de que se corriera la voz de que no valía la pena acercarse al cine. Príncipe de Persia: las arenas del tiempo, el film de aventuras de Disney, no pudo capturar la imaginación de nadie. Los ejecutivos de los estudios cinematográficos se de-sesperan ante las peores cifras en nueve años para el fin de semana del Memorial Day, la peor asistencia en por lo menos quince años y la posibilidad de que el record conseguido en 2009 haya sido una aberración, más que el inicio de una tendencia lucrativa. Eso significa una presión redoblada para tanques como Toy Story 3, que se estrenará en pocos días, y otros como Tron y Los viajes de Gulliver, a estrenarse más adelante. La industria empieza a aumentar su confianza en películas menos hipercostosas, pero atractivas para las masas.

El fin de semana de Memorial Day es uno de los más esperados en Hollywood: en esa fecha se estrenaron secuelas de Indiana Jones y Star Wars que hicieron historia. Esta vez, Sex and the City 2 sólo consiguió 37,1 millones de dólares y Príncipe de Persia 37,8 millones, con lo que no fue un estreno sino la cuarta película de Shrek la que encabezó el ranking, en su segunda semana de exhibición, con 55,7 millones. Brandon Gray, presidente de Box Office Mojo (la agencia que recolecta la información de taquilla), señala que la mayor responsabilidad pasa simplemente por la pésima realización cinematográfica.

“Las películas siempre han sido una fuente confiable para empatar las finanzas, y han demostrado ser a prueba de recesiones –señaló Gray–. Estos fracasos pueden atribuirse a las películas en sí, y no a las historias que están contando. Y también a las campañas de marketing. Estas campañas parecen reducirse a ‘Hey, es Shrek otra vez, vení a verlo; hey, Iron Man está de regreso, vení a verlo’. La gente va al cine para que le cuenten buenas historias, pero este mes Hollywood sólo tiene para ofrecerles un recauchutaje.”

Pero las decepciones del Memorial no son hechos aislados: las recaudaciones en taquilla vienen cayendo significativamente desde fines de marzo, luego de que Alicia en el País de las Maravillas y Avatar, campeones del fin de año pasado, fueron lógicamente bajando sus cifras de asistencia. Charlotte Jones, analista de la compañía de investigación Screen Digest, señala que los números de taquilla de Estados Unidos para los primeros tres meses del años están un 11 por ciento por debajo del mismo período de 2009. Al terminar el fin de semana, se perdió otro 4,8 por ciento. A pesar de eso, por ahora Screen Digest mantiene su pronóstico de otro año record, con recaudaciones estadounidenses brutas de once mil millones, después de conseguir diez mil millones por primera vez en su historia, en 2009. “Mirando el resto del año, los títulos en 3D pueden ser críticos”, dijo Jones.

La audiencia del cine tuvo un pico para los tiempos modernos en 2002, pero Hollywood se las arregló para exprimir recaudaciones aun más grandes vendiendo tickets más caros para las versiones 3D de sus tanques. Quizá la señal más alarmante del desastre de taquilla en los últimos días es la declinación del porcentaje de gente que fue a ver Shrek Forever After en 3D: a 20 dólares el ticket, el presupuesto familiar no parece capaz de resistir.

Gray advierte que quizá sea el comienzo de un fenómeno en el que “la moda 3D” toma un curso natural en el que sólo pueden esperarse cifras sorprendentes de películas–evento como Avatar. Y esgrime otras razones para temer. “Las cosas no están yendo precisamente sobre ruedas, con lo que las próximas películas que se estrenen tendrán que compensar este momento flojo para que la recaudación anual sea tan grande como el año pasado. La preocupación es que la gente mantenga el hábito de ir al cine, donde es expuesta a las futuras películas a través de trailers y posters. Si ven algo decente podrán llevar otra vez la situación a un panorama de gran actividad. Pero por ahora todo descansa demasiado en lo que consiga Toy Story 3.”

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.