No le alcanzaba a Pablo Trapero con que El clan –aun en cartelera y por mucho tiempo más– sea la película de las ocho que dirigió que convocó mayor cantidad de espectadores en las salas argentinas, con más de dos millones de tickets vendidos hasta el momento. Es que en su primera parada en el circuito de grandes festivales internacionales, su nombró sonó fuerte. Tanto que fue elegido el Mejor Director de la 72º edición del Festival de Venecia. Y si bien un León de Plata, como el que alzó ayer, no es poca cosa ni mucho menos, doble mérito tiene este reconocimiento si se tiene en cuenta que compitió con directores de la talla del laureado Aleksandr Sokurov (Francofonia), Marco Bellocchio (Sangre de mi sangre), Tom Hooper (The Danish Girl) y Amos Gitai (Rabin, the last day). Fue también una nueva distinción en tierra italiana, donde volvió después de diecisiete años y con recuerdos inolvidables: en 1999 con su ópera prima, Mundo Grúa, había logrado la máxima premiación de la sección paralela Semana de la Crítica. Ayer, la gala tuvo su sede en la Sala Grande del Palazzo del Cinema de Lido, en la célebre ciudad del noreste de Italia.

“Regresé a Buenos Aires el miércoles pasado después de la alfombra roja y el buen recibimiento aquí en Venecia. El viernes me llamaron del Festival pidiéndome que volviera para la premiación, pero no me detallaron para qué premio era. Llegué hoy, me cambié y vine corriendo a la ceremonia”, dijo Trapero exultante a los medios. “Cada vez que estoy aquí me sorprendo con la calidez de la crítica y del público. Es un momento único para la cinematografía de Latinoamérica, ya que los dos premios principales fueron para nosotros”, detalló al referirse también al León de Oro obtenido por el film venezolano Desde allá, de Lorenzo Vigas.

Guillermo Francella –que en la ficción compone e Arquímedes Puccio, el líder de una banda familiar de secuestradores de los 80–, no pudo obtener la Coppa Volpi al Mejor Actor: Fabrice Luchini por L’Hermine, de Christian Vincent (Francia), fue el que logró el galardón, según el dictamen del jurado de la selección oficial que estuvo presidido por el mexicano Alfonso Cuarón (ganador del Oscar como mejor director el año pasado por Gravedad), acompañado, entre otros, por el turco Nuri Bilge Ceylan (Palma de Oro en Cannes 2014 por Sueños de invierno), el polaco Pawel Pawlikowski (ganador del Oscar 2015 a Mejor Película Extranjera con Ida) y el taiwanés Hou Hsiao-hsien (mejor director en Cannes 2015 por The Assassin). Ese jurado fue también el responsable de otorgarle el Gran Premio del Jurado a Anomalisa, de Charlie Kaufman y Duke Johnson (Estados Unidos), mientras que la Coppa Volpi a la Mejor Actriz quedó en manos de Valeria Golino por Per amor vostro, de Giuseppe Gaudino (Italia).

A El clan y a Trapero los espera un fin de año movidito en materia de festivales: desde la ciudad de las góndolas volará directamente al Festival de Toronto, luego asistirá a una retrospectiva sobre su obra en Barcelona, en el marco de la Fiesta de la Merced, y finalmente llegará al Festival de San Sebastián. Para el realizador, “todo lo que pasa con la película aquí es muy parejo. No sólo es muy bien recibida por la crítica internacional, sino que la gente común, el público, se muestra emocionado con la historia que, si bien se basa en un hecho real, ya lo trasciende”, concluyó antes de ingresar a la cena oficial para los ganadores de las prestigiosas distinciones otorgadas por el festival más antiguo del mundo.