Mal año para terceras partes: la sensación de agotamiento generada por El Hombre Araña 3 y Piratas del Caribe 3 se extiende ahora a Shrek Tercero. Que, como en los casos anteriores, hace descender varios peldaños a la trilogía. Lo que varían son, en tal caso, las razones de la debilidad de cada una de ellas. Mientras que la tercera parte de la saga del joven arácnido defecciona por su inconducente multiplicación de villanos, la del bucanero metrosexual es larga, farragosa y conversadísima. Proliferación de secundarios poco y nada desarrollados, así como excesos conversacionales, presenta también la entrega número 3 del ogro verde. Cabe sumarle al debe de S3 una alarmante falta de gracia, tanto en los siempre abundantes chistes, guiños y referencias como en la pintura de personajes. La pregunta, común a las tres, es para qué la hicieron. La respuesta la dio Frank Zappa, hace más de 30 años: We’re Only in It for the Money.

Shrek Tercero encuentra al ogro asqueroso cada vez menos rechazado por su comunidad. Ahora no sólo está casado, como cualquier señor burgués, con la ogresa Fiona (que sueña con tener un montón de ogritos), sino que se halla a punto de convertirse en rey del país Muy, Muy Lejano. Su suegro, convertido en Rey-Rana por culpa de la malvada Hada Madrina, desfallece. Y el primero en la línea sucesoria es el grandote-verde-que-no-es-Hulk. Pero el tipo lo único que quiere es volver con Fiona a su apestoso pantano, por lo cual sale en busca del único a quien podría endosarle la corona. Que resulta no ser otro que cierto muchachito británico llamado... Arturo. ¿Qué Arturo, el que llegaría a ser Rey de Inglaterra? Sí, el mismo. ¿Pero cómo, Shrek entonces transcurría en las islas británicas, en el siglo V? Parece que sí. Y si no, lo mismo da. ¿O es que alguien se va a poner historicista con una película de animación protagonizada por un ogro, un burro chistoso y un gato que habla?

Queda dicho que Burro y El Gato con Botas siguen siendo los laderos del héroe, ambos muy desdibujados. Bajo el signo de la multiplicación de famosos, desfilan por aquí, además de Arthur Pendragon, Lancelot, Guinevere, Blanca Nieves, la Bella Durmiente, Rapunzel, Pinocho, Los Tres Chanchitos, el Hombre de Jengibre... Todos, tratando de impedir que el Príncipe Valiente, que es el malo de la película, usurpe el trono. Hay una muy buena secuencia introductoria, con el Ogro convertido en mito popular y personaje teatral, una parodia más o menos divertida de Arthur y sus amigos como alumnos de high school (“Totalmente, totalmente”, se la pasa repitiendo Guinevere) y una técnica de digitalización y colorización que cada día se sofistica más. El resto es pasar por caja y cobrar. Vaya si lo hicieron: sólo en Estados Unidos Shrek Tercero lleva recaudados más de 300 millones de dólares, en menos de un mes. No hay duda: es el rey.

5-SHREK TERCERO

(Shrek the Third) EE.UU., 2007.

Dirección: Chris Miller y Raman Hui.

Guión: Jeffrey Price, Peter Seaman, C. Miller y Aron Warner, sobre historia de Andrew Adamson.

Voces (versión subtitulada): Mike Myers, Eddie Murphy, Cameron Díaz, Antonio Banderas, Julie Andrews, John Cleese y Rupert Everett.