PLASTICA › MUESTRA COLECTIVA EN EL PALAIS DE GLACE
Un homenaje de artistas para Kosteki y Santillán
León Ferrari, Luis Felipe Noé, Adolfo Nigro y Diana Dowek son algunos de los artistas plásticos que se sumaron a la idea de Vicente Zito Lema: un homenaje a los piqueteros asesinados en el Puente Pueyrredón. Puede verse hasta el 9 de octubre.
Por Oscar Ranzani
Mientras avanza el juicio para dar con los responsables de los asesinatos de los piqueteros Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, que tuvieron lugar el 26 de junio de 2002, en el Puente Pueyrredón, el mundo del arte decidió rendirles un homenaje. La idea surgió del poeta Vicente Zito Lema, quien convocó a un grupo de artistas plásticos, tanto jóvenes como de vasta trayectoria. La idea fue creciendo hasta que se terminaron sumando a esta iniciativa 130 artistas, entre los que pueden mencionarse a León Ferrari, Luis Felipe Noé, Juan Carlos Romero, Diana Dowek, Ricardo Longhini, Adolfo Nigro y Horacio Zabala. Agrupados bajo el lema “Artistas plásticos por Kosteki y Santillán”, sus obras integran la muestra homenaje que puede visitarse de martes a domingo de 14 a 20 en el Palais de Glace (Posadas 1725), con entrada gratuita.
La exposición es heterogénea y las obras aluden a la masacre, ya sea directamente o bien mediante simbolizaciones. En otros casos, se trata de pinturas más abstractas. En la planta baja se pueden ver trabajos de Kosteki y Santillán y dibujos y fotografías de artistas piqueteros. Uno de los trabajos es del grupo Veintiséis/Seis, que expone una obra colectiva compuesta por veinte dibujos constituidos como pares de opuestos como, por ejemplo, Libertad/Opresión, Cambio Social/Dominación, Solidaridad/Individualismo, Dignidad/Humillación y Organización/Represión, entre otros. En el segundo piso, los visitantes podrán apreciar pinturas, acuarelas, collages, esculturas, grabados, objetos, instalaciones y obras lumínicas. Es decir, hay una amplia gama de las técnicas artísticas empleadas en esta muestra en la que prima el aspecto testimonial.
“Esta exposición realmente se la debíamos a los militantes populares”, expresa Diana Dowek a Página/12, que está exponiendo un dibujo de Kosteki. “Yo creo que es un episodio más de la búsqueda por la justicia –subraya León Ferrari–. Estuvimos buscando esa justicia durante tantos años a raíz de las violaciones de la dictadura. Y esta es otra violación, aunque de una supuesta democracia.” Ferrari está presentando una obra compuesta por una balanza rota que, después, “arregló” particularmente: “Es una balanza como es un poco nuestra justicia: arreglada con alambre”.
Para el artista plástico, que sufrió la presión de grupos ultracatólicos sobre la retrospectiva que presentó en el Centro Cultural Recoleta –de amplísima repercusión–, una de las formas de que el arte influya en la política “es hacer obras que denuncien los excesos del poder. Y otra forma es ésta: hacer muestras colectivas, juntarnos los artistas, reclamar justicia entre todos”. Juan Carlos Romero opina que “siempre se puede vincular el arte con la política. En todos los casos. Y yo creo que es imprescindible que los artistas se comprometan vinculándose con la política. Y una forma es ésta”, opina quien está exponiendo una obra digital con un texto sobre la violencia.
Otro que se suma a la discusión es Luis Felipe Noé, que está presentando una obra resultante de la combinación de dos dibujos: uno de ellos surgió para una antología de poesía de protesta social, donde se ven los cuerpos de Kosteki y Santillán y las letras de sus nombres entremezcladas. A su vez, está rodeado de dibujos de televisores con imágenes dibujadas por el propio Noé: “Es como si los televisores transmitieran el asesinato, dibujado por mí”, aclara. Sumado a la discusión entre arte y política, Noé argumenta que “no sé si el arte incide en la política, pero sí la política incide en la conciencia humana, y los artistas forman parte de eso”. Aunque aclara que “en determinadas circunstancias el arte también puede incidir. Por otra parte, de una manera u otra, todo arte es político porque forma parte de la sociedad”.
En tanto, Ricardo Longhini sostiene que “el arte y la política están absolutamente imbricados uno en el otro. En esta época o desde hace bastante tiempo se ha confundido el arte con las artes decorativas. No c reo que pueda existir un arte sin el compromiso con la época que se está viviendo. Y la época que vivimos, como todas, está digitada absolutamente por la política. Entonces, los artistas podemos tener dos opciones: mirar para otro lado o asumir la realidad cotidiana en la que convivimos. Y en la realidad cotidiana en la que vivimos, nos expresamos a través de la plástica pero con un contenido político”. Para Longhini, “por un lado o por el otro, el contenido político siempre está: por ausencia o por convicción”. Este artista está presentando una escultura que contiene la imagen de Kosteki y Santillán, donde hay un esténcil producido por el grupo de arte Veintiseis/Seis. La imagen está atravesada por una especie de cárcel formada por rejas de acero. Para Longhini, “esta imagen, de algún modo, está como presa y creo que hasta que no haya justicia por Kosteki y Santillán también vamos a estar todos los ciudadanos detrás de esa reja”.