Los Rolling Stones, se sabe, ya han dado toda la vuelta. Sus fans, también (en algunos de ellos, sobre todo aquí, la frase admite también otros significados). Y la industria discográfica necesita seguir dándole vueltas al asunto. Lo hace de un modo que facilita que los rezagados, si los hay, puedan ir completando el catálogo de sus bandas favoritas. En el caso de los Stones, el sello Universal, a partir de un reciente acuerdo multimillonario con la banda británica, comenzó a enviar al mercado las reediciones remasterizadas de sus álbumes post-1971. La publicación, que respeta escrupulosamente tracklists y artes originales, se está lanzando en grupos de cuatro CD por mes. El banquete rolinga se inauguró con la reedición de uno de los mejores discos de rock de todos los tiempos: Sticky Fingers. Aquel álbum con el controvertido arte de tapa de Andy Warhol, luce en las bateas junto con otros tal vez menos valiosos pero igualmente clásicos: Goats Head Soup (1973), It’s only Rock ‘n Roll (1974) y Black and Blue (1976). Los próximos lanzamientos, correspondientes al mes de junio, serán Some Girls, Emotional Rescue, Tattoo You y Undercover. En julio, en tanto, seguirá la lista de ediciones con Dirty Work, Steel Wheels, Voodoo Lounge, Bridges To Babylon y A Bigger Bang.