9-EXTRAORDINARY MACHINE
Fiona Apple. Sony BMG
Una buena parábola sobre la industria: estas doce canciones estuvieron a punto de no salir, porque el sello consideraba que nadie iba a comprarlas. Un desliz en Internet provocó un efecto dominó, y finalmente el tercer disco de Apple vio la luz de los parlantes. ¿Y cómo definir este CD de una chica que nada –pero nada– tiene que ver con sus congéneres pop? Encantador. Boccata di cardinale. Inquietante, movilizador, exquisito, con momentos excepcionales como Extraordinary Machine, Get him back, O’ Sailor o Window. Y esa voz: imperdible.
E.F.
8- YOU COULD HAVE IT SO MUCH BETTER
Franz Ferdinand. Sony BMG
Si con su disco debut se propusieron (y lograron) hacer que las chicas bailaran, con este segundo trabajo los escoceses Franz Ferdinand consolidan su imagen de dandies inteligentes capaces de poner a moverse a quienes deseen compartir el espíritu festivo de Do you want to o el frenesí de Evil and a heathen. La cruza entre guitarras new wave y gravísimos bajos funky continúa dando buenos resultados, pero también hay un par de baladas acústicas y riffs más duros, que le abren nuevas posibilidades de expresión al cuarteto.
R. C.
9- DE ESTE LADO
Juan Cruz de Urquiza SJazz, 2005
Después del Quinteto Urbano, el notable trompetista estrena nuevo grupo. El cuarteto, conformado por músicos de tradiciones heterogéneas (De Urquiza, Miguel Tarzia en guitarra, Mariano Otero en contrabajo y Pipi Piazzolla en batería), logra una suma expresiva y poderosa, con las diferencias funcionan como aliadas. Temas de Guillermo Klein, de De Urquiza y un antológico Promesas sobre el bidet, de Charly García, hacen que la vieja fórmula “jazz argentino” quiera decir, en este caso, algo concreto.
D.F.
9- OPERA PROIBITA
Cecilia Bartola Decca, 2005
En parte por el comienzo de la centuria y en parte por un terremoto, tres años después, entre 1700 y 1710, la ópera estuvo prohibida en Roma. Este CD, donde la mezzosoprano vuelve a asombrar con su prodigiosa agilidad en los pasajes ornamentados, gira, precisamente, alrededor de la Roma de esa época: bellísimas arias de óperas y oratorios de Händel, Alessandro Scarlatti y Antonio Caldara. Junto a Bartoli se lucen, en instrumentos originales, Les Musiciens du Louvre, dirigidos por Marc Minkowski.
D.F.