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Vestido de jean azul y camisa y saco negro, Diego Maradona debutó al frente de La noche del 10 cantando en primera persona La mano de Dios, el tema que Rodrigo le compuso al 10. En una escenografía impactante que simula ser una cancha de fútbol, y ante la mirada emocionada de toda su familia, Maradona abrió su programa con agradecimientos al por mayor. “Quiero agradecer –dijo– a mis viejos, mis hermanos, mis amigos y a todos los argentinos que están del otro lado.” Sin referencia alguna a la competencia televisiva, Diego prefirió hablar de su estado de salud. “Lo mío no es un milagro: es amor”, aclaró, antes de señalar que sus hijas y su ex esposa, Claudia Villafañe, fueron las que “estuvieron conmigo cuando mi alma estaba muerta”. Superados los saludos, Sergio Goycochea lo llevó a que disfrutara de la primera de las tantas sorpresas de la velada: un móvil en vivo en el que miles de hinchas del Napoli coreaban fervorosamente su nombre, de la misma forma que lo hacían cuando el 10 hizo grande al equipo de la ciudad del sur de Italia.