Aprovechando la entrega de diplomas a los nominados a los premios Martín Fierro, la Asociación de Periodistas de Radio y Televisión Argentina (Aptra) intentó explicar los motivos que llevaron a la cuestionada institución a eliminar como rubro la categoría Cultural - Educativa de la 37a entrega de los galardones. En su absurdo descargo, Aptra sostiene que el rubro de la polémica “no fue eliminado”, sino más bien reestructurado. “El rubro Cultural no fue eliminado sino que se fusionó con el de Interés General, que para la presente oportunidad pasó a denominarse Interés General/Cultural/Musical”, señala el comunicado, donde se obvia que la “fusión” de rubros se realizó en función de que se agregó el premio la categoría Reality Show.

Aunque en rigor Aptra sigue considerando a los programas culturales y/o educativos, lo cierto es que al quitarle una terna específica al género cae de maduro que para los más de cien miembros de la institución la cultura y la educación en televisión son temas menores, si se quiere. Tan poco tenidos en cuenta, incluso, que los anexan a una categoría tan amplia como contradictoria. A su vez, el argumento de que “distintas categorías suelen ser momentáneamente eliminadas, mientras aparecen otras nuevas que responden a una mecánica de la entidad en consonancia con la dinámica que imponen a la programación las distintas televisoras”, no hace más que refrendar que las categorías las impone la industria y no Aptra en función de sus propios intereses y valores en tanto institución periodística.

En efecto, en la terna Interés General/Cultural/Musical compiten ciclos tan heterogéneos como Algo habrán hecho, Almorzando con Mirtha Legrand y Mañanas informales. O sea: una falta de respeto para los ternados y que ameritó que Mario Pergolini, en su carácter de director de Cuatro Cabezas, le haya pedido públicamente al presidente de Aptra que quitara de la competencia a Algo habrán hecho, el ciclo que produce y conduce (junto a Felipe Pigna). Ante la imposibilidad de justificar la eliminación encubierta del rubro Cultural - Educativo, el comunicado hizo referencia tácita a Pergolini, al citar que es inaceptable que “conductores de programas, haciendo gala de una soberbia autosuficiente, desistan de participar tras haber sido nominados, porque desean elegir a quienes conforman la terna que les compete”. Para finalizar, no deja de llamar la atención que Aptra, cuyos papelones y polémicas son una constante, señale que quienes criticaron a la institución no poseen “autoridad moral para erigirse en jueces”.