De Benedetti tiene un plan ambicioso para 2008, que mantendrá bien ocupada a su compañía. En primer lugar, aprovechando esta época “fuera de casa”, el ballet emprenderá varias giras al interior del país, comenzando por Rosario, adonde llevarán esta primera propuesta en junio. Luego vendrán otros seis programas: versiones completas de Coppelia y Giselle; un programa compartido compuesto por Suite en blanc y El niño brujo; estrenos de Jorge Amarante y Rubén Gallardo; y dos reposiciones del propio De Benedetti: Sueño de una noche de verano, que ya se había visto en el Colón en 1990, y Ladislao. “Todas estas producciones han sido pensadas para los espacios que tenemos, el Opera y el Auditorio de Belgrano”, explica. Si bien siete programas en un año es mucho más de lo que este equipo estaba acostumbrado a realizar, De Benedetti está trabajando para encarar dos obras más: Don Quijote y un nuevo programa mixto, bien clásico, que incluiría el tercer acto de Raymonda, y una versión de Paquita.