Raúl Alarcón, más conocido como Florcita Motuda, cantó El vals del No durante la presentación de Los días del arcoiris, en Santiago. Todo el público volvió a tararear, una vez más, esa canción. “Lo interesante es que introdujo en el vals algunas consignas libertarias que atañen al Chile actual –revela Antonio Skármeta–; consignas del movimiento contra la construcción de las represas en la Patagonia, en los ríos Pascua y Baker. Quieren utilizar la energía de las aguas para construir fuentes térmicas; las trasladarían hasta Santiago, a través de tendidos eléctricos pavorosos que van a destruir gran parte del paisaje y la tierra. Los jóvenes han salido a protestar por las calles con mucha energía. El gobierno de (Sebastián) Piñera, que hasta ahora mantenía una actitud serena en la práctica democrática, reprimió.” Al escritor no le tiembla la voz cuando confiesa que siente “un poco de simpatía” hacia Piñera “por el hecho de haber votado por el No” en el plebiscito de 1988. “Una de las cuestiones que marca la diferencia entre el centroizquierda y el centroderecha es la tolerancia a la disidencia. Yo vi a jóvenes maltratados durante las manifestaciones y hacía mucho tiempo que no veía a la policía reprimir con gases y palos. Esto es para mí una luz roja, un llamado de alerta”, advierte el escritor.