Bialet Massé, un siglo después, la película de Sergio Iglesias sobre aquel destacado intelectual, médico, abogado, industrial, asesor de sindicatos, proclamado socialista y miembro del círculo roquista, se detiene en el Informe sobre la situación de las clases obreras. Realizado en 1904, a pedido del ministro Joaquín V. González, sirvió de base al proyecto de Código del Trabajo, rechazado tanto por la Unión Industrial Argentina como por las organizaciones obreras. Poco después de que el mismo ministro descargara sobre la militancia obrera, en ocasión de la huelga general de 1902, la draconiana Ley de Residencia, la percepción práctica del nuevo sujeto social que estaba emergiendo en la lucha política hizo que lo más ilustrado de la cúpula de la burguesía argentina se planteara la necesidad de conocerlo científicamente: en 1902 y 1903 hubo huelgas en la Capital, Buenos Aires, Rosario, Tucumán, Entre Ríos, Córdoba, Santiago del Estero y Mendoza. Era necesario proveer de conocimiento para encontrarle un lugar en el sistema institucional político, sin vulnerar los intereses fundamentales del capital.

La cámara de Sergio Iglesias revive una parte del recorrido de Bialet Massé, describiendo con entrevistas e imágenes una realidad actual que se superpone con la lectura del texto centenario, en una correspondencia escalofriante. Pero esa correspondencia invita a reflexionar sobre la diferencia entre aquel capitalismo argentino, en plena expansión sobre nuevos territorios, y el actual, en su fase de descomposición. Aunque Argentina siga siendo, entonces y ahora, un país dependiente.

También exige una reflexión sobre las salidas que plantean los entrevistados, desde la denuncia resignada en Misiones o Salta, el retorno a la economía precapitalista en Jujuy o el “ni capitalistas ni marxistas” del discurso mapuche, hasta la puesta en producción de la fábrica Zanon por sus obreros. Porque falta la mirada sobre las luchas de masas, reducidas a una imagen del “Argentinazo”.

* Sociólogo e historiador.