Entre las “experiencias compartidas”, el Filbita se traslada este año al hall de entrada del Hospital de Pediatría Dr. Juan P. Garrahan. Allí se propone una intervención poética: la sala de espera, se promete, será invadida por poesía y arte. Un grupo de narradores coordinado por Diana Tarnofky invitará a disfrutar de poemas susurrados al oído y microrrelatos debajo de un paraguas (“pups”: pequeños universos portátiles). Además, con Arte en cuento, o cómo llegar con libros y arte a todos los rincones de la ciudad, la autora y editora Silvia Sirkis (Arte a Babor) realizará un recorrido a través de historias que presentarán a distintos artistas y sus obras. Con Un nombre, una historia. Cada nombre tiene una historia propia detrás, la ilustradora Paula Adamo (Ed. Del Eclipse) invitará a los pequeños lectores a jugar con las letras de su nombre, a dibujarlas y a contar una historia a partir de ellas. Y con Kamishibai: El pájaro bigote, Nicolás Schuff y Claudia Degliuomini invitarán a intervenir ilustraciones de su libro y a crear “pájaros bigote” (AH Pípala).

Otro “socio” del Filbita en esta edición es la Fundación Temas, una ONG que trabaja desde hace diez años en la Villa 21-24 de Barracas, donde lleva adelante diversos programas de promoción de la lectura, y sostiene una biblioteca especializada en literatura infantil y juvenil. Para “celebrar el trabajo cotidiano que se desarrolla allí y seguir garantizando el derecho a la cultura”, Filbita programa una parte de sus propuestas en el barrio, gracias al trabajo conjunto con Temas, encuentros con autores y una jornada de actividades al aire libre y abierta a todo el público el día sábado. Pero, además, desde mediados de año y junto a la autora y editora Ruth Kaufman, trabaja en el proyecto Altavoz: Poesía Parlante. A modo de cierre de este proyecto, un altavoz recorrerá las calles del barrio, desparramando poesías leídas por los chicos.