“Garufa”, el legendario tango de Carlos Gardel, ya hacía alusión a su existencia: “Tenés más pretensiones que bataclana”. A pesar de que su nombre quedó impregnado en el imaginario latinoamericano como sinónimo de “mujer de vida alegre”, en Francia su mera mención evoca el hedonismo y la cultura popular parisina. Fundado en 1865, Le Bataclan está erigido sobre una pagoda china, mientras que su denominación está inspirada en una opereta oriental de 1855. Fue al comienzo café, teatro, sala de baile y restorán, para transformarse luego en una de las locaciones por excelencia del vodevil y de la revista musical. Sin embargo, desde la década del 60 del siglo XX tomó forma de sala de recitales no sólo para artistas de rock (por ahí pasaron The Police, The Cure, Oasis y Prince), sino de artistas como Jane Birkin y Jairo (ambos grabaron discos en vivo allí). Ultimamente estaba abocado a presentar artistas locales, entre ellos raperos, pero al parecer un gato negro se le cruzó por el camino a Eagles of Death Metal antes de ser programados ese día. Esto le salvó el pellejo a Deftones, quienes actuarían allí entre sábado y lunes. Así es el azar.