Se consagraron como los videos más consultados de los sitios YouTube y PornoTube (como en su momento también los de presuntas Cinthia y Griselda de Gran Hermano). Su calidad fue de un amateurismo evidente en la rusticidad de la imagen (iluminación básica, planos mal recortados, interrupción de la acción antes de la culminación sexual). Los videos sexuales supuestamente pescados in fraganti en Internet fueron uno de los temas más comentados del año, fogueados por las chicas que negaban ser ellas o miraban al costado desde la vidriera masiva del Bailando por un sueño, de Marcelo Tinelli. El entertainment industrial y el amateurismo se alimentaron mutuamente, cada vez que la vedette de la calle Corrientes iluminó su sucucho y el show del prime time recibió en sus fauces a la desarropada. Cuando se repasan las apariciones sorpresivas de estos videos surge una lista que incluye a una supuesta Wanda Nara practicándole sexo oral a un tipo con su cabeza recortada o a una más certificada Chachi Tedesco (chica High School Musical hasta que la bajaron del staff tras su sexo explícito en YouTube), un par de jugadores de Boca (Ever Banega y Jonathan Maidana) masturbándose, celebrados por las fans con piropos sobre el tamaño y la desinhibición y una más reciente detección de una doble de Luciana Salazar, señalada como la propia Luciana desde el programa de chismes de Viviana Canosa, lo que culminó en una conferencia de prensa, llanto y presentación de evidencia a cargo de la rubia. En 2007 no hubo nada que envidiar en estas pampas a las apariciones escandalosas de Britney Spears y su ex, de Paris Hilton o de Colin Farell en sus respectivas camas; eso sí, la calidad de los tapes siempre fue aquí un poco más precaria, con lluvias indeseables en el mejor momento y oscuridad parcial que dificultó la identificación de la “estrella” sexual.