“En el mes de diciembre muchas personas notan dificultad para dormir bien y se preocupan por ello –afirma la doctora Margarita Blanco–. Esta situación se inicia con el cambio de estación. Cuando avanza la primavera, cambian las temperaturas del ambiente interno y externo y aumenta la intensidad y duración de la luz diurna.” Además, a esta altura del año se suman otras situaciones que, en un contexto normal, pueden alterar la calidad del sueño:

1. Ya han terminado las clases en las escuelas para niños y adolescentes y en las universidades aumenta la exigencia de los exámenes finales.
2. La proximidad de las fiestas de fin de año influye en el estado de ánimo, tanto positiva como negativamente. Se recuerdan las cosas felices y las tristezas; se hacen proyectos para los festejos tradicionales y los gastos que se harán o no.
3. La temperatura ambiente es mayor y la luz solar más intensa.
“Este año, debemos agregar la preocupación que nos provoca la situación por la que atraviesa el país y el posible aumento de la tensión social -afirma Blanco–. El Club del Sueño sugiere a la población tener en cuenta la trascendencia de los factores enumerados y su influencia en el estado de ánimo de cada uno, con el objeto de disminuir la posibilidad de consecuencias indeseables.”