Viernes, 12 de agosto de 2016 | Hoy
WWW
Un sitio chileno alentado por Javiera Tapia, una periodista melómana que se niega a elegir entre la frivolidad y el feminismo.
Por Dolores Curia
¿Qué tienen en común Michelle Bachelet acomodándose la banda presidencial, Diane Keaton en impecable traje y corbata y el proyecto de música electrónica de la ex actriz porno Sasha Grey (protagonista de The Girlfriend Experience de Steven Sotherberg)? Que como parodia o como drama todas ellas son tema de conversación en Es mi fiesta, un sitio chileno que lee con lente feminista las noticias de la semana, las novedades editoriales, musicales, cinematográficas y demás variedades de la cultura popular. Su creadora es Javiera Tapia, una periodista melómana que asegura tener más discos que billetes en su caja de ahorro y que antes de lanzar este portal tenía un blog al que iban a parar sus escritos descarriados, los que no pasaban el filtro editorial en los medios mainstream para los que trabajaba. Estos textos giraban siempre entorno a una misma preocupación: la participación -o su falta- de las mujeres en la escena musical. Su blog fue sumando seguidores, sobre todo mujeres que decían no encontrar por ese entonces (2009) otros espacios debatir esos temas.
En 2013, Es mi fiesta nació abriéndose paso hacia otros campos, ya no sólo el musical, y con la idea de ir llenando ese vacío: “Creo que esta falta que en Chile se siente tanto tiene que ver con que por mucho tiempo el feminismo se desarrolló en ámbitos más cerrados como la Academia y la contracultura, siempre grupos inmóviles y cerrados. Es Mi Fiesta se trata de abrir la conversación. Tener una teoría detrás, quizás, pero no lanzártela en la cara. Sino aterrizarla a situaciones o hechos que la gran mayoría hemos presenciado. También, ser una respuesta en contra de cómo la prensa tradicional muchas veces obvia el análisis de género y crea estereotipos horribles al momento de entregar información.” Por Es mi fiesta desfilan textos con tono de diario íntimo sobre las maternidades millennials, reseñas de discos de Rihanna, columnas sobre debates políticos en la región, artes visuales, y hasta textos de ficción tema libre. Una playlist con placeres culposos o canciones vapuleadas (Ashlee Simpson, Selena Gomez, Mandy Moore) se alterna con un perfil de Gladys Marín, jovencísima dirigente del PC, exiliada durante el pinochetismo. Es mi fiesta también cruza la cordillera”: Helena Pérez Bellas (integrante de la banda argentina Los Galgos) lanza desde más acá miradas punzantes sobre el affaire Pampita/Vicuña/China Suárez, hasta una lectura de la novela La Uruguaya, de Pablo Mairal, con el foco puesto en las masculinidades y la angustia existencial de mediana edad.
“Siempre me ha parecido interesante poner una mirada de género sobre áreas que se han visto tradicionalmente como poco serias. Por mucho tiempo sentí que al asumirte como feminista se te negaba automáticamente el derecho a vivir en una contradicción”, dice Javiera. Sobre ese cruce de lo aparentemente frívolo y el tráfico de mensajes a contrapelo tiene mucho para decir la canción que Lesley Gore popularizó y que le da nombre al sitio, “It’s my party”. Un hit fugaz que explotó en 1963, catapultó a Gore como niña prodigio del pop (tenía 16) y preparó el terreno para su posterior himno protofeminista “You don’t own me.” Tanto Leslie como Javiera parecen compartir una misma duda: “¿por qué no puedo sentirme feminista si escucho pop mainstream?” La letra de “It’s my party” dice “Es mi fiesta y puedo llorar si quiero”. En esas palabras Javiera vio una analogía sobre “un mundo que nos dice que tenemos que están felices porque se supone que somos mujeres libres y que reclamar –o llorar– por algo está de más. En el decidir llorar públicamente hay un poder.”
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.