ESPAÑA

Apología de la violación

José Manuel Castelao asumió el cargo de presidente del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior y a los dos días declaró: “Las leyes son como las mujeres: están para violarlas”. El funcionario era parte del Ministerio de Empleo del gobierno del Partido Popular, pero tuvo que renunciar después de la apelación a la violencia sexual hacia las mujeres. Castelao, igualmente, dijo que fue malinterpretado y se intentó defender: “Cité la frase, lo reconozco, pero en el sentido inverso, aunque no puedo achacar a otro una responsabilidad que es mía. Si pudiera hacer alguna penitencia para borrar lo que hice la haría”.

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MEXICO

Una gaseosa acusada de sexista

“Nuevo macho-actitud ligera” es el eslogan de Coca-Cola México que indignó a muchas feministas mexicanas que decidieron marchar hacia la empresa y poner un simbólico cartel de clausura, según relata la periodista Anayeli García Martínez, de la agencia Cimac. Para el Observatorio Ciudadano Nacional del Femicidio, entre otras agrupaciones, la empresa muestra como normal el machismo. Ellas creen que la palabra macho está identificada con “violador, golpeador, insensible, irracional, animal y asesino” y que no debe ser promovida. Por su parte, Alexis Hernández, integrante del Colectivo Los Histéricos, también acusó a la fábrica de gaseosas por ridiculizar a los varones.

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COLOMBIA

Amenazas a activista

La abogada Mónica Roa, directora para Latinoamérica de la ONG Women’s Link Worldwide, debió salir del país para proteger su vida por defender la interrupción voluntaria del embarazo. Otras veces ya había sido amenazada. Pero, en esta oportunidad, además de las intimidaciones, enfrenta una demanda por injurias y calumnias de la procuradora delegada para los Derechos de la Infancia, la Adolescencia y la Familia, Ilva Myriam Hoyos, que responde a sectores conservadores. En Colombia se realizan más de 400.000 abortos al año y la mayoría en forma clandestina. Apenas el 0,8 por ciento se realiza en centros de salud en los casos no punibles. Por eso, el 32 por ciento de las que abortan sufre complicaciones debido a las condiciones de riesgo.