¿Cuáles fueron los ejes rectores de Fibra y cómo cimentaron el estilo para esta publicación digital?

–Desde el principio, la revista Fibra fue concebida como un espacio de diálogo entre los creativos y los diseñadores emergentes, las ciencias sociales y las marcas. Esta primera idea de desarrollar un contenido digital dirigido a estos diferentes profesionales define nuestra identidad editorial. Todavía es un proyecto muy joven y reciente, pero el eje principal de la revista responde a un entendimiento sociológico de las tendencias y a la intención de proponer un contenido profesional que nos permite percibir los comportamientos sociales y los hábitos de consumo desde otra mirada. No somos una revista comercial de moda, pero tampoco somos una revista universitaria. A través de las tendencias, nuestra meta principal es tratar de entender hacia dónde se dirigen y por qué. Los grandes referentes de Fibra son los autores y primeros sociólogos, como Roland Barthes, Pierre Bourdieu o Maffesoli, quienes empezaron a estudiar los símbolos de consumo en la dinámica de las clases sociales. Pero en el seno de la revista nos interesamos principalmente en los autores contemporáneos y latinoamericanos, de ahí que Susana Saulquin es nuestro mayor referente y también la “madrina” del proyecto Fibra.

¿Ya tenían experiencia en el análisis y los estudios de moda y de tendencias?

–La revista Fibra surgió de la unión de doce profesionales y egresadas de la primera promoción del posgrado de Sociología del Diseño de la UBA, a cargo de Susana Saulquin. Ella nos permitió justamente refinar y profundizar nuestra mirada sociológica. Nos enseñó una metodología de investigación, así como también apoyó siempre la dinámica interna del grupo en clase, con la posibilidad de que cada una pudiera añadir su mirada. Todas las profesionales del equipo Fibra siempre fuimos apasionadas por el diseño, por las tendencias en general y por el análisis de los comportamientos humanos. Algunas somos diseñadoras de indumentaria, otras trabajamos para marcas de lujo o del “prêt-à-porter”, y el equipo admite fotógrafa, socióloga, profesionales de la comunicación, responsable de un observatorio del consumo en Europa, periodistas y bloggers. Formamos un equipo de diferentes nacionalidades y profesiones.

¿Cómo resumís las premisas editoriales de Fibra?

–Fibra es un contenido digital que sale por temática editorial, lo que nos impone un contexto de análisis para cada nueva publicación. Su fuerza está en que profundizamos en las temáticas. Fibra se involucra entonces a través del arte, de las innovaciones del diseño, a través del consumo de masas y de todos los ámbitos que alimentan los diferentes fenómenos de tendencia.

¿De qué cruces de disciplinas se alimentan para el análisis de las tendencias?

–La base teórica de nuestro trabajo sobre las tendencias se apoya principalmente en las disciplinas de la sociología, la filosofía y las ciencias sociales, para descifrar los comportamientos sociales. La mirada del diseñador interviene ahí para brindar a la revista un análisis técnico y estético del diseño, y el marketing nos permite ahondar en la observación de la comunicación de las marcas. Usamos también las disciplinas de la comunicación y del periodismo: textos que sean atractivos y accesibles en la lectura.

¿De qué modo el gran “pogo” virtual en que vivimos y el exceso de información desde las redes modifican los espacios y el análisis para la crítica y las reflexiones sobre la moda?

–Por primera vez en la historia de la moda, Internet permitió invertir los sistemas de comunicación, aportando a los individuos la posibilidad de relacionarse con sus marcas preferidas. Más allá de la simbólica de clase de Bourdieu, la moda se volvió hoy un perímetro de expresión de su propia identidad, es accesible para todos.

Creemos que del individualismo creciente cruzado con las tecnologías 2.0, resultó una especie de democratización de la moda, generando entonces en la web una alimentación sostenible y cada vez más interpersonal de las informaciones disponibles sobre las tendencias. La web sigue cambiando los reflejos de consumo y, como diría Saulquin, las tendencias surgen de una ruptura social. Eso podría explicar el fenómeno de los blogs de moda que hoy intervienen como nuevas fuentes de inspiración para los creativos y los diseñadores. Consideramos que el libro de Paula Sibilia, La intimidad como espectáculo, ayuda a entender esta dinámica. A través del creciente protagonismo de las tendencias masivas o de las tendencias “de nicho” notamos la fuerte presencia de las comunidades urbanas y más especialmente el seno de la nueva generación. Por otro lado, las inspiraciones y estéticas tribales en Argentina y en América latina parecen reafirmar la importancia de esa noción de “pertenencia” a un grupo social o una tribu moderna. La elección de un formato digital nos permite adaptarnos al ritmo de la moda, Internet es la estrella de lo efímero y de lo instantáneo.

¿Qué representa para ustedes “la moda”?

–En relación con el pensamiento de Pierre Bourdieu, la moda “es un tema de elites de la sociología moderna” y, en este sentido, la moda es justamente la bajada de las tendencias sociales.

¿Cuáles son las tendencias imperantes en Buenos Aires a pocos días de la presentación de colecciones para el verano 2014? ¿Cómo van a cubrir los desfiles de BAFWeek que se realizarán entre el martes y el viernes de la semana próxima?

–El BAFWeek es el mayor evento de moda en Argentina y una fuente gigante de información para quienes analizamos la moda. Nos interesará observar cuáles fueron las tendencias más marcadas y sus proyecciones a futuro. El BAFWeek podría influir mucho en la elección de los editoriales de la revista Fibra en 2014. http://revistafibra.com/