ESTADOS UNIDOS

Prisión perpetua para secuestrador de mujeres

El juez Michel Russo consideró que Michelle Knight, Amanda Berry y Georgina DeJesus eran retenidas como esclavas en la casa de Ariel Castro y, por eso, lo condenó a prisión perpetua por más de 1000 años. “No hay lugar en esta ciudad, no hay lugar en este país, no hay lugar en el mundo para quienes esclavizan a otros”, dijo el juez, y aclaró que nunca será liberado de la cárcel. La semana pasada, Castro se declaró culpable de 937 cargos, incluidos homicidio y secuestro, por un acuerdo que le evitó la pena de muerte que existe en Estados Unidos. “(Yo) superaré lo que ha pasado, (pero tú) enfrentarás el infierno por toda la eternidad”, le dijo Knight ante la Justicia.

BRASIL

Presionan a Dilma para vetar atención de emergencia

Parlamentarios de la bancada religiosa del Congreso Nacional presionan a la presidenta Dilma Rousseff para que vete el proyecto de ley que reglamenta la atención de emergencia en hospitales a mujeres víctimas de violencia sexual o estupro. Para los opositores religiosos, el proyecto es una especie de maniobra para ampliar las previsiones legales del aborto, que es permitido en caso de embarazo producto de violación, riesgo de vida de la mujer y anencefalia fetal. Las cifras de violencia sexual crecen a diario: según datos del Instituto de Seguridad Pública, el estado de Río de Janeiro reportó 6029 casos de violación en 2012, lo que significa un aumento del 24 por ciento respecto de 2011, cuando se registraron 4917 casos.

EL SALVADOR

Maltrato en el camino hacia Estados Unidos

“En el trance de las madres migrantes por recuperar a sus hijas e hijos que se quedaron en sus países de origen, centenares de menores de edad intentan llegar a Estados Unidos de manera irregular y sufren vejaciones, maltratos, caen en redes de trata, o incluso pierden la vida”, cuenta la periodista Marta Sigarán de Cimac Noticias desde San Salvador. Tanto es así que en el 2012, 976 niñas, niños y adolescentes (307 menores de 12 años) migrantes fueron repatriados desde México a El Salvador. Mientras que Unicef denuncia que las niñas/os migrantes sufren accidentes como asfixia, deshidratación o heridas y son explotados laboral o sexualmente o pueden morir en el camino.