FúTBOL › BOCA GOLEO A CENTRAL Y MOSTRO QUE EQUIPO QUIERE SER
El que le gusta a la gente
Le quitó el invicto al líder y fue el protagonista de un partidazo ante un equipo como el rosarino, que no se rindió y que sigue conservando la punta. Palermo convirtió dos goles, uno de penal; Palacio, la figura, marcó los otros dos. Villa había marcado el empate transitorio y Abbondanzieri le contuvo un penal a Ferrari.
Por Daniel Guiñazú
El Boca que le gusta a la gente goleó y dejó sin invicto a Central. Pero el 4-1 que, de a ratos, hizo aullar de placer a la multitud azul y oro no debe llamar a engaños. Boca jugó tan bien como lo hizo el miércoles ante Pachuca por la Copa. Aunque Central no se rindió rápido y dio pelea hasta el final. Boca tuvo a Palacio en el punto más alto de su romance con la hinchada, a Palermo lleno de gol y de inteligencia para jugar y hacer jugar, a Guglielminpietro corriendo la cancha con dinámica y criterio, a Gago simplificando todo a un toque y a Cagna yendo a fondo en el primer minuto y en el último también. Pero Abbondanzieri le atajó un penal a Ferrari, sacó dos pelotas de gol y Encina hizo vibrar el travesaño boquense cuando el partido estaba 3-1, señal más que clara que nunca el equipo de don Angel Tulio Zof se resignó a un papel secundario.
Boca ganó muy bien. Con autoridad, presencia, presión, pujanza, continuidad y el fútbol de un equipo que quizá se haya despertado demasiado tarde en el Clausura. Central no le discutió demasiado la pelota en el medio. Prefirió la espera en su propio campo con dos líneas de cuatro para salir rápido. Y Boca lo aprovechó con un juego directo, vertical, punzante, que se apoyó en la personalidad de Gago para hacer pie en el medio, se extendió con la pujanza por los costados de Cagna y Cardozo (Vargas se fue lesionado al minuto del primer tiempo), se prolongó en el tranco de Guglielminpietro y explotó en la velocidad de Palacio y en los goles de Palermo. Un perfecto cabezazo suyo puso a Boca en ventaja. Y aunque Central empató rápido con otro cabezazo de Villa, el mayor peso de las individualidades de Boca terminó por volcar a su favor el destino del partido y su resultado.
Palacio le ganó una pelota dividida a Raldes y forzó a que Ojeda le hiciera un penal, que Palermo convirtió con furia en el 2-1. En el arranque del segundo tiempo, Palacio le puso la cabeza a un tiro libre de Baiano y decretó el 3-1. Y después le dio el toque de gracia a Central, definiendo a la perfección un pase de Guglielminpietro. Quedaban 25 minutos, y cualquier otro equipo se hubiera rendido ante las evidencias. Pero este Central demostró, en ese momento, un carácter que es el anticipo de un montón de cosas buenas. No se olvidó de nada de lo bueno que hasta ahí había hecho. Y estando 1-4 abajo jugó de la misma manera. Tocando, saliendo por los costados con Ferrari y Papa, con el fútbol de Encina y con una permanente intención de todos para jugar asociado, le hizo cosquillas a Boca y transformó a Abbondanzieri en uno de los protagonistas del partido. Perdieron, pero no les cabe ningún reproche. Por este camino, a los pibes del viejo Zof sólo les aguarda la alegría.
Boca 4
Abbondanzieri; Baiano; Schiavi; Morel; Calvo; Cagna; Gago; Vargas; Guglielminpietro; Palacio; Palermo.
DT: Benítez.
Central 1
Ojeda; Ferrari; Raldes; Fassi; Rivarola; Encina; Andrés Díaz; Ledesma; Papa; Vitti; Villa.
DT: Zof.
Estadio: Boca.
Arbitro: Horacio Elizondo.
Goles: 17m y 41m, Palermo (B), el segundo de penal; 23m, Villa (C); 51m y 65m, Palacio (B)
Cambios: 4m, Cardozo (6) por Vargas (B); 64m, Monges por A.Díaz (C); 68m, Ruben por Vitti (C); 72m, Delgado por Guglielminpietro (B); 73m, G.Barros Schelotto por Palermo (B).
Incidencia: 84m, Abbondanzieri (B) le detuvo un penal a Ferrari (C).