FúTBOL
Un regalo de Diez
Unos 30 chicos del comedor Evita, del barrio Zavaleta, de entre 3 y 25 años, fueron a ver la película Héroes II, sobre el Mundial de 1990, al microcine de DeporTEA, con Julio Olarticoechea, uno de los integrantes de la Selección Argentina que jugó aquel campeonato, como invitado sorpresa. Pero la sorpresa se las dio el Vasco a los pibes cuando se pusieron a conversar después de la película (foto). Después de escuchar varias preguntas acerca de su relación con Maradona, Olarticoechea sugirió: “¿Qué les parece si lo llamo a Diego por teléfono?”. Los chicos abrieron bien grande los ojos y el futbolista se atajó. “Si no está, le dejamos un mensaje entre todos.”
Todos, incluido el Vasco, esperaban el silencio eterno y la posterior alarmita que diera pie a un mensaje al vacío. Todos, o casi todos...
–¡¿Diego?!... ¿Cómo te va, estabas durmiendo?... Estoy con los chicos de Zavaleta, que te quieren saludar...
Cuando algunos de los presentes se preguntaban si no era en el fondo una gran broma, Olarticoechea apretó un botón, que puso una voz única en el parlante.
–¡Hola, chicos! ¿Cómo andan todos? Los quiero saludar y les quiero decir que le den bola al Vasco, que es un gran tipo...
Los pibes, que apenas podían creerlo, estallaron en un grito de alegría. Olarticoechea terminó de explicarle a Maradona de qué se trataba, y devolvió la voz.
–Chicos, sigan así, jueguen al fútbol, o al deporte que les guste, pero hagan deporte, que es lo más lindo que hay, y háganle caso a sus padres, que quieren lo mejor para ustedes...
Había sido un regalo de diez. Del Diez.