Lunes, 7 de mayo de 2007 | Hoy
FúTBOL › ARGENTINOS Y BOCA EMPATARON 3 A 3 UN ENCUENTRO LLENO DE EMOCION
Tres goles de cabeza de los locales y tres remates violentos de los visitantes, en un duelo emotivo.
La cancha es chica, pero el corazón, la movilidad y la exposición de recursos fueron muy grandes, y por eso salió un partidazo. En La Paternal, Argentinos Juniors y Boca protagonizaron 90 minutos cambiantes, cargados de emoción, con un resultado abierto hasta el instante final. Lo pudo ganar Argentinos, que iba venciendo 2 a 0 cuando se jugaba la mitad del primer tiempo; lo tuvo Boca, que lo dio vuelta y se puso 3 a 2 en el complemento, y al final lo empató Argentinos, dejando clavada la marca de la justicia porque el 3 a 3 quedó como pintado.
La Paternal, el barrio donde está ubicada la cancha de Argentinos Juniors, parece hacer referencia a lo bien que le va al club en sus enfrentamientos contra equipos grandes en esa cancha en los últimos tiempos. El terreno es chico, 100 metros por 66, 645 metros cuadrados más pequeño que el de Boca, algo así como la superficie de unos diez departamentos de tres ambientes. En esos terrenos conviene pegarle de media distancia, si se cuenta con jugadores capaces para ello. Cardozo, por ejemplo, que tiene una buena pegada, metió un zapatazo espectacular sobre la primera media hora, en la jugada clave para el análisis del juego.
Ocurre que hasta ese momento Argentinos Juniors ganaba 2 a 0, manejaba todos los hilos ante un rival muy confundido y parecía encaminarse hacia una cómoda victoria, pero ese gol cambió los ánimos y provocó sustanciales modificaciones en el trámite. El cuadro de Caruso Lombardi sorprendió a Boca en el arranque con una actitud claramente ofensiva y llegadas por los laterales. De entrada metió un gol que el juez de línea anuló por una supuesta posición adelantada, a los 20m se puso en ventaja con una palomita de Choy González y cuatro minutos más tarde amplió la ventaja con otro cabezazo, esta vez de Núñez. Las dos jugadas tuvieron varios puntos en común: fueron centros desde la derecha, conectados en la izquierda por los goleadores que se anticiparon a un estático Ibarra y no hubo ninguna responsabilidad de Caranta. Boca apenas había dado algún vestigio de vida con un cabezazo de Riquelme, cuando Argentinos daba la sensación de tenerlo todo controlado y provocaba profundos cortes en la defensa de Boca con el tridente Choy-Hauche-Núñez. Si todo esto hubiera pasado en el segundo tiempo, cualquiera podía haber supuesto que los boquenses se habían quedado sin piernas luego del encuentro de mitad de semana contra Vélez, pero todo eso pasó en el primer período y la única explicación había que buscarla por el lado de lo bien que lo había planteado Argentinos.
El disparo de Cardozo, un derechazo que se metió en un ángulo del arco del sorprendido Pontiroli, provocó un doble efecto: fue un llamado de atención para que los locales descubrieran que las cosas no les iban a resultar tan fáciles, y levantó el ánimo de los boquenses. En el segundo tiempo, sin Núñez (lesionado, fue sustituido por Aban), Argentinos le dejó la pelota a su rival y apostó a liquidar el partido de contra.
Y Boca fue al frente con Riquelme –en una tarde flojita, casi de punta– y con Cardozo, muy movedizo, haciendo circular la pelota. A los 13m llegó el empate con un tremendo derechazo de Palermo (de derecha, con tanta potencia como si le hubiera dado con su pierna más hábil) y cinco minutos más tarde Ibarra se reivindicó de sus errores en los goles de Argentinos con un zurdazo impresionante (como si le hubiera dado con su pierna más hábil) desde afuera del área, luego de un buen zigzag desde la derecha hacia el medio. La tortilla se había dado vuelta y ahora todo indicaba que los visitantes se iban a quedar con la victoria. Más aún cuando Silvestre casi convierte el cuarto.
Pero había más sorpresas: Neill desvió un cabezazo y sobre el pucho Choy González con otro exacto golpe de cabeza, después de un tiro libre, metió el gol que los hinchas de San Lorenzo gritaron tanto como los de Argentinos Juniors. Fue el 3 a 3 definitivo, el que puso justicia.
Estadio: Argentinos Juniors.
Arbitro: Sergio Pezzotta.
Goles: 20m y 73m Choy González (AJ); 24m Núñez (AJ), 31m Cardozo (B; 58m Palermo (B) y 64m Ybarra (B).
Cambios: 46m Aban (h) por Núñez (AJ); 59m Niell por Hauche; 71m Boselli por Palacio (B) y 73m Córdoba por Ortigoza.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.