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La Primera B Nacional, segunda categoría del fútbol argentino desde 1986, celebra un cuarto de siglo de existencia con un atractivo torneo que acaba de iniciarse y que un histórico debutante como River jerarquiza.

En 1966, a poco de asumir como interventor de la AFA, Valentín Suárez impuso una importante modificación en la forma de disputa de los campeonatos. Desde 1967, además del campeonato del que participaban los clubes directamente afiliados, de Capital, Gran Buenos Aires, La Plata, Rosario y Santa Fe, en la segunda parte del año se disputó un Campeonato Nacional en el que intervinieron clubes de distintas provincias argentinas. Esta medida fue muy cuestionada en su momento, argumentándose principalmente que los equipos “chacareros” no tendrían jerarquía suficiente para competir. Sin embargo, a pesar de las críticas iniciales, el Nacional tuvo vida: 19 ediciones se disputaron entre 1967 y 1985.

Sus años de oro fueron los ’70, destacándose la actuación de Talleres de Córdoba, que en 1977 estuvo a punto de quedarse con el título, como corolario de varias campañas extraordinarias en las que movilizó a miles de cordobeses en cada partido que disputó fuera de su provincia.

En los ’80, la AFA tomó algunas medidas que restaron atractivos al Nacional. Se permitió que Talleres y otros clubes jugaran el Metropolitano, y luego se invirtió el orden de disputa de los torneos, pasando el Nacional a ocupar los primeros meses del calendario, hasta que en 1985 se decidió que se llevara a cabo el último Campeonato Nacional.

Por entonces tuvo lugar una nueva reestructuración del fútbol argentino. Se volvió a disputar, como hasta 1966, un campeonato único de Primera y la AFA creó el Nacional B, que pasó a constituirse como la segunda categoría del fútbol argentino y cuyo ganador obtenía el derecho de jugar en Primera.

El 19 de julio de 1986 se disputó la fecha inicial del primer Nacional B, del que tomaron parte 22 clubes: nueve directamente afiliados a AFA (Colón, Banfield, Huracán, Deportivo Armenio, Chacarita, Tigre, Defensa y Justicia, Lanús y Los Andes) y otros trece del Interior: Guaraní Antonio Franco, de Posadas; Atlético Concepción (Tucumán), Deportivo Maipú de Mendoza; Ferro, de General Pico; Central Norte, de Salta; Chaco For Ever, Deportivo Mandiyú, de Corrientes; Gimnasia de Jujuy, Cipolletti, Unión de Villa Krause (San Juan), Central Córdoba, de Santiago del Estero, Belgrano de Córdoba y Douglas Haig, de Pergamino.

Los resultados deportivos llevaron a que, 25 años después, solamente uno de los clubes del interior fundadores del Nacional B esté actualmente en Primera (Belgrano), otro continúa en la B Nacional (Gimnasia de Jujuy), mientras que diez de los once restantes están participando en competencias de menor jerarquía. El restante, Mandiyú de Corrientes, desapareció.

Por su parte, cuatro de los clubes directamente afiliados a la AFA están en Primera, tres permanecen en la B Nacional y dos (Armenio y Los Andes) están en la Primera B.

En 25 años de historia del Nacional B, antes del arranque de esta edición, se habían jugado ya 11.720 partidos, con casi 29 mil goles marcados. Participaron ya 88 clubes de 16 provincias y de la ciudad de Buenos Aires, incluyendo a once instituciones que únicamente jugaron promociones. Solamente las provincias de Formosa, Catamarca, La Rioja, San Luis, Neuquén, Santa Cruz y Tierra del Fuego no han tenido representantes en la B Nacional.

El club con mayor cantidad de partidos disputados en la categoría es el último campeón, Atlético Rafaela, con 849 encuentros. Los santafesinos solamente estuvieron ausentes en las tres primeras ediciones y en la temporada 2003/04, cuando jugaron en Primera. Este año sucede lo mismo.

Defensa y Justicia, al igual que los rafaelinos, también disputó 21 ediciones, jugando 822 partidos. En 1993 bajó a la Primera B, pero regresó en 1997 y desde entonces se mantuvo en la categoría.