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Cayó tan mal en San Lorenzo el 1-1 ante Estudiantes que el técnico Leonardo Madelón y los jugadores se fueron sin hablar del Nuevo Gasómetro. Y los rumores sobre un inminente cambio de DT se intensificaron en cada rincón del estadio, luego del silencio profundo con el que la gente despidió al equipo azulgrana. En verdad, el empate se vivió como un paso en falso. San Lorenzo jugó 38 minutos de la segunda etapa con un hombre de más por la expulsión de Cristian Cellay tras el penal a Juan Manuel Salgueiro que convirtió Néstor Ortigoza, y nunca lo pudo hacer valer.

Es más: sin merecerlo, perdía 1-0 al término del primer tiempo. A los 17 minutos, el arquero Champagne chocó en el aire con su compañero Carlos Bueno, perdió una pelota fácil y Cellay, que andaba por ahí, pescó el rebote y adelantó a Estudiantes en la carrera. Casi fue lo único que hizo en el partido el equipo de La Plata. Generalmente estuvo impreciso con la pelota, no generó fútbol y cuando se quedó con diez jugadores, el técnico Azconzábal plantó dos líneas de cuatro por detrás de la línea del balón, desamparó arriba a Boselli (luego reemplazado por la reaparición de Enzo Pérez) y apostó sin tapujos por aguantar la igualdad que acabó llevándose.

San Lorenzo, entonces, tuvo más la pelota. Pero no la tuvo bien. Ni siquiera cuando, de regreso para el segundo tiempo, Madelón puso a Romagnoli por Bazán para que jugara como enganche detrás de los uruguayos Salgueiro y Bueno. En un par de pases y toques, Ortigoza ratificó su condición de muy buen jugador y levantó los pocos aplausos y entusiasmos de la tarde. Pero estuvo demasiado solo como para resolver todos los problemas de su equipo. De tres cuartos de cancha en adelante, lo único que se le ocurrió a la mayoría fue lanzar centros y pelotazos dirigidos a la cabeza de Bueno.

Tres veces se impuso el delantero oriental en el aire del área de Estudiantes. Fueron las tres situaciones más peligrosas de San Lorenzo. Después, lo único que hubo fueron esfuerzos individuales que bastaron para dejar a salvo el orgullo y poder mirarse de frente. Pero no resultaron suficientes para lo primero (y casi lo único) que había que hacer: ganar de local para aliviar su antepenúltima posición en la tabla de los promedios que, fecha a fecha, parece pesarle más y más.

Estadio: San Lorenzo.

Arbitro: Néstor Pitana.

Goles: 17m, Cellay (E); 56m, Ortigoza (SL).

Cambios: 17m, Méndez (5) por Luna (SL); 46m, Romagnoli (5) por Bazán (SL); 57m, Sarulyte (5) por M. González (E); 60m, Coria (4) por G. Fernández (E); 69m, Gigliotti por Salgueiro (SL); 79m, E. Pérez por Boselli (E).

Incidencia: 55m expulsado Cellay (E).