Lun 29.10.2012
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FúTBOL › LA SATISFACCIóN EN EL VESTUARIO DE BOCA

“Tuvimos que remar y remar”

“Tuvimos que remar y remar. No dimos el partido por perdido y después de tanto insistir al final lo pudimos empatar.” La declaración es de Walter Erviti. Y esas simples palabras no hacen más que explicar a la perfección cómo fue el Superclásico para Boca, que desde el vestuario tuvo el partido cuesta arriba. Por eso, el agónico empate del ex mediocampista de Banfield fue “un desahogo” por todo el “esfuerzo” que hizo el equipo de la Ribera. “Fue un lindo gol, un desahogo por el momento que estamos viviendo, y por todo lo que hablan afuera. Sacamos un punto que para nosotros es importante por cómo se dio el partido”, indicó Erviti.

Sin embargo, pese a que valoró el punto obtenido sobre la hora, el volante reconoció que durante los 90 minutos River “fue superior”. “Fueron superiores, pero simplemente porque se les facilitaron las cosas al hacer un gol muy rápido. Nosotros tenemos el mérito de nunca darnos por vencidos”, remarcó.

Por su parte, Rolando Schiavi, que disputó su décimo y último Superclásico, admitió que el conjunto dirigido por Julio César Falcioni jugó “mal” en el primer tiempo, pero ponderó el empate porque “levanta anímicamente al plantel”. “En el primer tiempo no hicimos las cosas bien. Después, mejoramos muchísimo en la parte final, y a base de voluntad y fuerza para poder darlo vuelta nos recuperamos del 0-2 en contra. Este empate sobre el final nos levanta anímicamente y nos recompone en la pelea hacia el título”, señaló el defensor, que aseguró que “nunca” olvidará este partido. “Fue mi último Boca-River y por eso siempre lo recordaré. Será imposible olvidar cómo la gente nos alentó con la caravana desde la salida del hotel hasta el estadio”, expresó el ex Argentinos.

Agustín Orion, gran responsable del primer gol de River, coincidió con Schiavi en que la gran virtud que tuvo Boca para sobreponerse al resultado adverso fue “la fuerza y la energía”. “Ese gol de entrada nos desubicó y costó reaccionar. Pero en el segundo tiempo, cuando parecía que se llevaban el partido, pusimos el alma y lo empatamos”, indicó el arquero, que evitó la autocrítica pública. “Los errores se ven para adentro. Igual, en un tiro libre, hay virtud del que patea”, se excusó.

Guillermo Burdisso, por su parte, resaltó: “Lo ganamos a lo Boca, con el corazón. Sabíamos que iba a ser complicado, pero lo empatamos de forma merecida”. Leandro Somoza, quien no cumplió un buen partido, relativizó la importancia del empate. “Queríamos ganar para seguir en la pelea, pero al menos sacamos un punto que nos permite soñar con el campeonato”, apuntó.

Por último, Cristian Chávez prefirió dejar el análisis de lado para chicanear a River. “Deben esperar seis meses más para ganarnos”, expresó.

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