¿Qué dirá el Santo Padre que vive en Roma?

–En la semana un hincha le preguntó si le iban a ganar a Boca y le dijo que sí, que se quedara tranquilo y agregó que “a los cuervos les gusta la pizza”. ¿Cómo sabía el hombre? ¿Se habrá imaginado que el trámite del partido iba a ser infernal para San Lorenzo y que al final Matos iba a tocar el cielo con las manos? ¿O fue el mismo quien le dio a Bauza el celular de Dios que tan buen resultado le había dado a Carlos Bianchi en otros tiempos? ¿Qué dirá ahora? ¿Qué fue Justicia Divina? ¿O dirá como Bauza esa falacia de que en el fútbol los merecimientos no existen?

- En el nombre del padre: La tan mentada paternidad de San Lorenzo es una de las explicaciones posibles para entender el resultado final. No es de las más racionales, pero fue tan raro todo que hasta se puede aceptar como válido aquello que se tiene más a mano: 17 partidos de ventaja ahora en los mano a mano oficiales entre ambos equipos.

- El espíritu santo: Lo del espíritu de lucha y la entrega sin claudicaciones, el espíritu santo para el caso, es un versículo que suelen usar los que salen a aguantar el partido poniendo mucha garra y especulan con un error adversario para quedarse con un premio inmerecido. Es cierto, el equipo que conduce Bauza puso su oficio y una gran voluntad para conseguir el primer objetivo del empate. Pero pudo haberse quedado con 10 si el árbitro hubiera echado a Yepes tal como se lo merecía después de un tremendo planchazo a Palacios. Era roja directa y no amarilla.

- El infierno de Bentancur: El partido se iba de largo con el cero a cero que le caía mucho mejor a San Lorenzo que a Boca, cuando el pibe Bentancur cruzó una pelota desde la izquierda hacia el medio sin advertir que Matos estaba parado delante del Cata Díaz y que lo dejaba solo para convertir. A la salida de la Bombonera muchos hinchas querían crucificar al pibe y a Arruabarrena que lo había dejado en la cancha. Las derrotas a menudo abren el camino a los comentarios más destemplados. Bentancur, que jugó la pelota siempre con justeza y redondeó un gran primer tiempo, se equivocó. Un error conceptual en un chico que no es canchero y es un verdadero crack.

- Los siete pecados capitales: Boca mereció más y el castigo de la derrota es excesivo. Sin embargo deberá tomar nota de los pecados capitales cometidos. 1) Palacios perdió un gol cantado (¡era por abajo, Palacios!). 2) Calleri tendría que haber cabeceado hacia abajo en la que quedó solo en el área chica. 3) Tuvo 8 corners a favor y no aprovechó ninguno, ni siquiera para provocar algún susto. 4) No dispuso de tantas situaciones de gol como podría indicarlo su mayor posesión de la pelota (70 a 30). 5) Perdió tranquilidad en el tramo final del partido, con algunos supuestos errores del árbitro. 6) Se descompensó defensivamente y quedó muy expuesto en algunos avances aislados de San Lorenzo (en la jugada en la que Rolle se apuró para rematar, por ejemplo, desde muy buena posición). 7) La desgracia de Bentancur.

- La resurrección: El gol de Matos fue un golpe mortal para Boca, que había perdido la batalla de los escritorios antes y ahora perdió el partido y la punta. Para resurgir, para que Arruabarrena salga del purgatorio sólo le queda ganarle la semana que viene a River.

Amén.

Estadio: Boca.

Arbitro: Fernando Echenique.

Gol: 90m Matos (SL).

Cambios: 57m Monzón (5) por Colazo (B), 62m Rolle (4) por Barrientos (SL), 67m Matos por Cauteruccio (SL), 72m Ortigoza por Villalba (SL), 77m Chávez por Palacios (B).