El cordobés David Nalbandian volvió a confirmar su brillante cierre de la temporada 2007 y su deseo de pelear en lo más alto del ranking ATP. En la final del Masters Series de París derrotó ayer en sets corridos 6-4 y 6-0 al número dos del mundo, el español Rafael Nadal, y consiguió de esta manera su segundo título del año, ya que hace dos semanas había obtenido el Masters Series de Madrid con una victoria sobre el número uno, el suizo Roger Federer. Los puntos obtenidos en los dos últimos Masters Series de la temporada le permitieron escalar posiciones en el ranking hasta la novena posición, lo que lo convierte en el primer suplente para ingresar al Masters de Shanghai que se disputará la próxima semana.

Derrochaba confianza Nalbandian, a pesar de que enfrente estaba Nadal. Es que el argentino llegó a la final del torneo de París-Bercy jugando a un altísimo nivel, lo que en varias oportunidades le valió los aplausos del exigente público francés. Venía de dejar en el camino a varios pesos pesado como Federer, los españoles David Ferrer y Carlos Moyá, el francés Richard Gasquet, y cerró una semana inolvidable con su segundo triunfo ante Nadal, en igual cantidad de partidos, a quien ya había derrotado en los cuartos de final del Masters Series de Madrid.

Con ese envión salió a jugar la final, en la que logró imponer su seguridad y su talento para derrotar sin atenuantes a un Nadal que parecía no dar crédito de lo que estaba sucediendo en el court. El arranque de la primera manga fue parejo. Ambos conservaron sus servicios hasta el octavo juego. Pero Nalbandian, aprovechando la presión de haber llegado 4-4 al noveno juego, consiguió quebrar el servicio del mallorquí en la primera oportunidad de break point que tuvo. Fue un duro golpe para Nadal, quien casi no pudo ofrecer resistencia en el décimo juego, en el que Nalbandian volvió a conservar su servicio para llevarse el set también en la primera oportunidad (de tres) que dispuso.

El segundo set fue un trámite para el argentino, porque Nadal, que luego iba acusar una molestia en sus rodillas, no encontraba cómo debilitar el juego del argentino, que se hacía cada vez más contundente, con devoluciones muy fuertes y precisas. Nadal repetía los mismos errores del primer set, sobre todo en los puntos jugados con su segundo servicio (ganó sólo 1 de 6), lo que le permitió al de Unquillo quebrar el servicio al español en el primer juego, luego de un intento frustrado, conservar el suyo en el segundo, volver a quebrarlo en el tercero, también en su segunda chance tras levantar un 40-0, y nuevamente en el quinto juego, en su primera oportunidad de dos, para cerrar el parcial 6-0. Una hora y ocho minutos duró el encuentro. Con su primer servicio, Nalbandian ganó el 83 por ciento de los puntos y metió 25 tiros ganadores, mientras que Nadal apenas contó 4.

Mucho parece tener que ver con el presente de Nalbandian su nuevo entrenador, el ex número 10 del mundo Martín Jaite, y el trabajo de su preparador físico, Fernando Cao. Hacia ambos corrió a festejar el cordobés, que también recibió un afectuoso saludo del entrenador y tío del español, Tony Nadal.

La obtención de este título, sumado al obtenido hace dos semanas en Madrid, le permitió a Nalbandian igualar el record que tenía el ruso Marat Safin, ex número uno del mundo, quien en 2004 conquistó ambos torneos (Madrid y París) en forma consecutiva. Y, lo más importante, lo dejó como primer suplente para ingresar al Masters de Shanghai, que ya tiene a sus ocho clasificados pero, al igual que en 2005, grandes posibilidades de que se produzca alguna deserción. El estadounidense Andy Roddick, quien no participó de los torneos de Madrid y París por lesión, y el ruso Nikolay Davydenko, quien además de ser investigado por el caso de las apuestas y arreglos de partidos, tiene problemas con su codo derecho.