No había sido nada bueno el 2015 para el tenis argentino. La eliminación temprana del correntino Leonardo Mayer en el Masters 1000 de París fijaba una marca negativa y la confirmación de una mala noticia: tras 18 años de éxitos ininterrumpidos, los tenistas argentinos cerraban una temporada sin festejar títulos. Pero esa racha se cortó ayer, y por partida doble. El azuleño Federico Delbonis y el tandilense Juan Mónaco concretaron con sendos triunfos la muy buena semana que habían tenido en los ATP 250 de Marrakech y Houston. Delbo derrotó en la final de torneo de Marruecos en sets corridos al juvenil croata Borna Coric, y Pico hizo lo propio frente al estadounidense Jack Sock, para lograr por segunda vez en la historia del tenis argentino un festejo por partida doble. La última vez que eso había ocurrido fue en 2009, cuando el tandilense Juan Martín Del Potro ganó el ATP de Auckland y el cordobés David Nalbandian se adjudicó el mismo día el ATP de Sydney.

Delbonis, de 25 años y número 47 del ranking, que todavía parece seguir impulsado por haber alcanzado este año la tercera ronda del abierto de Australia y por la gran victoria que tuvo este año frente al escocés Andy Murray, número dos del mundo, en el Masters 1000 de Indian Wells, confirmó ayer el buen momento que atraviesa al ganarle con autoridad al joven croata de 19 años Coric (48) por 6-2 y 6-4, al cabo de una hora y 29 minutos del partido. Este resultado le permitió al azuleño, además de festejar el título con el que el tenis nacional cortó la racha de 20 meses sin alegrías, concretar una semana espectacular sin haber cedido un solo set, ya que inició su participación en segunda ronda con un triunfo 6-4 y 6-4 sobre el holandés Thiemo De Bakker (105), continuó con una victoria en cuartos por 7-5 y 6-2 ante el español Pablo Carreño Busta (52) y el sábado se había impuesto en semifinales por 6-4 y 6-3 frente al también español Alert Montañes (123).

El de ayer es el segundo título de Delbonis en el circuito profesional, y segundo también sobre polvo de ladrillo, tras la obtención en 2014 del torneo de San Pablo. Además, el zurdo de Azul disputó las finales, también sobre ladrillo, su superficie favorita, en Hamburgo 2013 y Niza 2014. “Estoy muy feliz de volver a ganar un título ATP. Jugué en un gran nivel y aproveché mis chances, pero no fue fácil. Trabajo para lograr estas cosas. Para ganar en este nivel tenés que estar enfocado mentalmente todo el partido”, comentó Delbonis tras la victoria que le permitió al tenis local cortar la racha de 20 meses sin títulos, ya el último en alzar un trofeo había sido Leonardo Mayer, cuando en julio de 2014 derrotó en la final de Hamburgo al incansable español David Ferrer. Coric, por su parte, comentó: “Fue un partido duro y no pude encontrarle solución”.

No iba a ser la única alegría del día para el tenis nacional, porque tras el triunfo de Delbonis la atención se centró en lo que iba a ocurrir en Houston con Pico Mónaco (148 del ranking), quien no tuvo un buen comienzo ante la promesa local Sock (25) pero se recuperó a tiempo y terminó dando vuelta el trámite para quedarse con el título con un 3-6, 6-3 y 7-5, al cabo de dos horas y 15 minutos de juego.

Para Pico, de 32 años, el título de ayer es el noveno de su carrera y el primero desde el obtenido en 2013 en Düsseldorf. Además, se trató de la segunda vez que logra coronarse en torneo de Houston, que se juega sobre polvo de ladrillo, ya que lo había logrado en 2012, tras vencer en la final por 6-2, 3-6 y 6-3 al entonces top ten estadounidense, John Isner.

El partido de ayer entre Mónaco y Sock tuvo ribetes drámáticos, ya que ambos tenistas alternaron aciertos y errores con algunos problemas físicos, Pico en la segunda manga, el estadounidense en la tercera. Pico consiguió romper la paridad de las dos primeras mangas en el último set, donde se vio lo mejor del encuentro. Con el envión de la segunda manga, Pico llegó a estar 4-1 arriba, pero Sock, a pesar de acusar un malestar en su hombro derecho, se recuperó y ganó cuatro games seguidos para pasar a dominar el marcador por 5-4. Pero Pico no se amedrentó, hilvanó tres juegos seguidos y, con su saque, pudo cerrar la final que le permitió al tenis argentino volver a festejar por partida doble. “No hay palabras para describir este momento”, reconoció Pico, feliz por el título y por los 250 puntos que lo volverán a meter dentro del top 100.

Pico Mónaco, campeón en Houston.