El jurado es impiadoso. Los méritos de quienes van a ser incluidos en esta nómina deben resplandecer. Es lo que sucede con el 2010 de Luciana Aymar:

- Campeona del mundo con el seleccionado argentino de hockey femenino, fue eje y figura con la cinta de capitán para llevar a Las Leonas a un nuevo título. Esta vez en casa, la rosarina, profeta en su tierra, levantó a mediados de septiembre el trofeo más importante de la disciplina.

- Con 5 tantos (tres en el debut para golear a Sudáfrica por 5 a 3), fue pilar en el mediocampo para generar juego a partir de su habilidad y velocidad. A lo largo del certamen demostró los lujos que ya son costumbre, pues sólo ella es capaz de dejar a tantos rivales en su camino al gol. El equipo de Carlos Retegui ganó todos los partidos. En la primera fase, además del seleccionado africano pasaron Corea, España, Inglaterra y China, equipo al que le convirtió probablemente el gol más vistoso de la historia de Las Leonas: entrando por la izquierda, dejó cuatro rivales en el camino y remató sobre el achique de una quinta y la salida de la arquera. Golazo es poco.

- Ya en semifinales, el escollo a superar fue Alemania, y la número 10 volvió a lucirse para abrir el marcador y el camino a la final con un triunfo por 2 a 1. En el encuentro cumbre, enfrente estaba Holanda, un viejo conocido. Argentina fue más de la mano de Lucha, venció 3-1 y se coronó por segunda vez en su historia campeona, luego del trofeo obtenido en Australia ocho años antes. Aymar, elegida la mejor jugadora del torneo, levantó en su casa la Copa.

- En julio ya lo había hecho cuando Las Leonas conquistaron su tercer Champions Trophy consecutivo, en Nottingham, Inglaterra. Allí, el rival final también fue Holanda, y el 4-2 le dio un nuevo campeonato a la Selección albiceleste. Aymar sólo marcó un gol en el torneo, en el triunfo ante Nueva Zelanda 4-0, durante una primera fase en que el equipo arrancó de menos a más. Luego de la derrota con Inglaterra y el empate frente a Alemania, cuatro victorias consecutivas transformaron a Argentina en el mejor elenco del certamen. Misma distinción que finalmente se llevó Aymar, que sin contundencia en el arco rival supo ponerse el plantel al hombro y fue considerada la mejor entre las mejores.

- Las medallas que se colgó al cuello no fueron únicamente a partir del desempeño colectivo con Las Leonas. A nivel local también tuvo su peregrinaje triunfal. Como ocurre desde 2008, condujo a Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires a ser el equipo invencible del hockey argentino. Tercer año consecutivo en el que se lleva el Torneo Metropolitano y la Liga Nacional.

Por eso en las distinciones de deportistas siempre hubo presencia de Aymar, pues ya es el apellido que continúa al suspenso de “el galardón a la mejora jugadora de hockey es para...”. Por cuarto año seguido, la Federación Internacional la eligió como la mejor de la temporada. Nuevamente en la cima del hockey mundial, repitió lo que viene demostrando desde 2007 y ya había obtenido también en 2001, 2004 y 2005. En Montreux, Suiza, alzó por séptima vez la distinción y la coronaron “Leyenda” del deporte de los palos y los corners cortos. Nombrada, a fin de cuentas, integrante del Equipo de las Estrellas. “Amo jugar al hockey, pero lo que más amo en el mundo es defender la camiseta de mi país”, sentenció aquel 12 de noviembre.

Además, los premios individuales en torno del deporte se multiplicaron. Jorge Newbery de la especialidad y el de Oro; Konex de Platino por la disciplina y el Oro. A fin de temporada, el Olimpia de Plata por el hockey, y claro está, también el Oro, superando incluso a Lionel Messi.

Evaluación completa, exitosa. Aymar ganó todo lo que jugó y levantó todas las medallas por las cuales compitió. La exigencia del suplemento debería mermar, tener consideración de los objetivos y las metas cumplidas por quien para muchos es la mejor jugadora de hockey de la historia. Si se analizan los fríos números, la tapa es para ella, pues la mejor tuvo en 2010 su mejor año.

No puede dejarse pasar por alto un dato más que contundente: Aymar fue tentada en agosto para ser tapa de la revista Playboy, versión argentina. Y Lucha, seductora dentro de la cancha desplegando su figura, haciendo lo que quiere con la pelotita y el palo, prefirió decir que no a la interesante propuesta.

Producción: Matías Quercia.