El seleccionado argentino femenino de hockey sobre césped, Las Leonas, actual campeón del mundo, goleó 19-0 a Barbados y se adjudicó el grupo A de los Juegos Panamericanos, al completarse la fase regular. Las chicas, que acaparan todas las medallas doradas desde que compiten las mujeres (Indianápolis 1987), jugarán las semifinales el próximo miércoles ante Chile, escolta de la zona B. Los goles fueron anotados por Soledad García (cuatro), Carla Rebecchi (tres), Luciana Aymar (tres), Noel Barrionuevo (dos), Rosario Luchetti (dos), Delfina Merino, María Josefina Sruoga, Rocío Sánchez, María D’Elía y Sofía Maccari.

Argentina dejó en claro por qué es una de las potencias del hockey mundial y dominó el partido desde el inicio, sin darle chances a Barbados, que sólo generó tres llegadas sobre el arco rival. A pesar de la goleada, Barbados tuvo en su arquera Lana Als a la mayor responsable de que la goleada no fuera aún más abultada.

Con apenas tres minutos de juego, Carla Rebecchi abrió el marcador tras una jugada por derecha, y antes del cuarto de hora aparecieron los goles de Aymar, tras quitarse de encima a cuatro defensoras barbadenses; Barrionuevo, de córner corto, y Delfina Merino.

Cuando faltaba una hora de juego, el partido ya estaba definido y sólo hubo tiempo para que las argentinas se dedicaran a ampliar el marcador, que reflejó un 10-0 al término del primer tiempo.

En el segundo parcial, jugado con el tono de un entrenamiento, se vieron definiciones lujosas. En el 13-0, Soledad García, con la bocha pegada al palo, encaró a la arquera Als, la dejó tirada en el suelo, retrocedió unos pasos y definió por encima de su cuerpo para despertar una ovación entre las mil personas presentes.

Las jugadoras de Barbados, lejos de molestarse con los lujos rivales, jugaron el partido paralizadas por la admiración generada por las campeonas del mundo. “Nos reímos mucho durante el partido. Las chicas de Barbados nos decían que nos admiraban, y nos pedían fotos cuando termináramos de jugar”, contó Luciana Aymar, la mejor jugadora del mundo.

En tanto, el entrenador argentino, Carlos Retegui, reconoció que esa situación “desvirtuó” el partido, siempre jugado con “el mayor de los respetos” de parte de su equipo. Ahora empiezan los exámenes en serio, con el oro y la clasificación para Londres en la mira.