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Agustín Calleri desaprovechó una chance increíble para ganar su primer torneo de ATP. El cordobés vencía 6-2, 5-1 al chileno Nicolás Massú en la final de la Copa AT&T y dispuso de dos match-points, pero no supo cerrar el juego y terminó perdiendo 2-6, 7-6, 6-2. De esa manera, el chileno se encontró con una victoria que una hora antes ni siquiera soñaba. A pesar de la derrota, Calleri logrará el mejor ranking de su carrera, ya que aparecerá alrededor del puesto 55º. Sin embargo, la gran incógnita pasa por saber cuánto tiempo pasará para que el riocuartense pueda olvidar esta derrota, que convirtió la semana más linda de su vida, como la calificó el sábado tras llegar a la final, en una de sus peores pesadillas. “Sin dudas que la ansiedad me jugó una mala pasada. Era mi primera final y quizá me faltó experiencia en el momento de la definición”, se lamentó Calleri.
El desarrollo del encuentro es poco creíble. En la primera hora, Calleri dominó todos los aspectos del juego. Mantuvo con solvencia su servicio y quebró cuatro veces el saque de su adversario. Se encaminaba derechito a una cómoda victoria para estirar su racha en el Buenos Aires Lawn Tennis y para adjudicarse su primera final de ATP. Por el contrario, Massú no encontraba su nivel y estaba más preocupado por los calambres en su antebrazo derecho que por el partido. Sin embargo, ocurrió lo inesperado.
Massú mantuvo su servicio y se animó a soltar sus golpes. Por el contrario, Calleri comenzó a sentir la presión de la definición. Todos los tiros que hasta ese momento eran winners, pasaron a ser errores no forzados. Su porcentaje de primeros servicios bajó de manera notable. Para colmo, tras haber perdido apenas cuatro puntos en los primeros seis juegos de su saque, el cordobés no pudo cerrar el partido con su servicio, lo que fue la primera señal de alarma. Al game siguiente, la chance más clara que tuvo Calleri: 15-40 con el saque de Massú. Pero a pesar de los dos matchpoints, el argentino tampoco pudo cristalizar la victoria. “En el primer match-point, Massú me sacó sobre la línea y en el segundo puso una pelota ganadora imposible de llegar, así que él también tiene sus méritos”, comentó Calleri.
A esa altura, los errores del argentino mantenían el partido, ya que Massú todavía no se animaba a creer en su recuperación. Incluso lo admitió tras el partido: “Estaba jugando muy mal y las cosas no me salían. Por eso pensé que iba a perder muy fácil. En un momento Agustín empezó a errar y yo traté de equivocarme lo menos posible. Lo pude hacer y se dio vuelta la historia”, comentó el chileno, quien ayer ganó su primer título de ATP. Claro que Calleri todavía contó con otras ocasiones propicias que tampoco supo aprovechar. En el tie break remontó un 3-5, pero luego, en un punto para colocarse match-point, dejó un smash sencillo en la red.
Allí sí, las 3500 personas que se acercaron a presenciar la final pudieron presagiar lo que finalmente ocurrió. Massú estaba fortalecido anímicamente, había recuperado confianza en su juego y ya se había olvidado de los inconvenientes físicos. Por el contrario, Calleri era consciente de que había dejado escapar su oportunidad. “Cuando perdí el segundo set, traté de no pensar en lo que había pasado y empezar de nuevo pero Massú estaba con mucha confianza y jugó muy bien en el tercer set”, explicó el argentino.
Ante ese panorama, Calleri intentó luchar, pero su saque ya no era confiable. Por eso Massú no tuvo inconvenientes para quebrarle tres veces y asegurarse el título. Entonces fue el momento en que Calleri abandonó su discurso resultadista de los días anteriores. “Haber perdido la final no empaña todo lo que hice en la semana, donde jugué un gran tenis y le gané al brasileño Gustavo Kuerten”. Es cierto, pero...