El año de Juan Martín Del Potro tuvo un comienzo y un final explosivos. Arrancó con la decisión de no integrar el equipo argentino de Copa Davis, que fue bastante cuestionada en los medios pero que, sin dudas, tenía una justificación de peso, ya que el tandilense había planificado un año muy duro de trabajo para intentar meterse entre los cinco primeros del ranking mundial, meta que alcanzó en los últimos meses del año; y concluyó con una fuerte polémica y cruce de facturas con el presidente de la AAT, Arturo Grimaldi, a quien le criticó la falta de diálogo y de consulta. En el medio, el tenis y una temporada en la que las lesiones no fueron protagonistas como ocurrió en años anteriores y en la que Del Potro con 5255 puntos de ranking arañó el número tres del mundo, quedando a sólo 545 puntos del español David Ferrer (3) y a 535 del británico Andy Murray (4). La cantidad de puntos obtenida por Del Potro fue la más alta después de la que había sido su gran irrupción en el circuito y su mejor temporada, en 2009. En esa oportunidad, y gracias a la obtención del US Open, su primer y único torneo de Grand Slam conquistado, el tandilense alcanzó los 6785 puntos. En este 2013, Del Potro superó por segunda vez la barrera de los 5000 y por tercera vez la marca de 50 partidos ganados en una misma temporada, con un registro de 51 victorias y 16 caídas.

Gracias a las victorias de este 2013, el único jugador no europeo en el top ten alcanzó otra marca ya que se convirtió –según los números aportados por su agente de prensa– en el sexto argentino en superar los 300 triunfos (305 en total), ubicándose detrás de Guillermo Vilas (929), David Nalbandian (383), José Luis Clerc (375), Juan Ignacio Chela (326) y delante del capitán del equipo de Copa Davis, Martín Jaite (301).

Claro que las más importantes de esas victorias fueron contra los top five. Del Potro logró cuatro triunfos en cinco presentaciones. Y, curiosamente, les ganó durante el año a los cuatro tenistas que tiene arriba: Novak Djokovic, Rafa Nadal, Ferrer y Murray, y también a Roger Federer, que ocupa la sexta posición del ranking. Y tanto a Djokovic como a Nadal lo hizo cuando estos estaban como número uno: al serbio en Indian Wells y al español en Shanghai, para convertirse en el tenista argentino con más triunfos contra los números uno, con siete victorias.

En cuanto a títulos, esta temporada cosechó cuatro: Basilea, Tokio, Washington y Rotterdam, todos ATP 500, para sumar un total de 17 en su carrera y convertirse en el tercer tenista argentino más ganador detrás de Vilas y Clerc; mientras que en torneos de Masters 1000 alcanzó la final en Indian Wells y en Shanghai.