Un contrapunto sin desperdicio se dio en la madrugada de ayer entre Gustavo Quinteros, entrenador de Ecuador, y Dunga, seleccionador de Brasil, por el gol que el árbitro no convalidó en el partido que en la medianoche del sábado jugaron las dos selecciones por el Grupo B de la Copa América. “Era un gol legítimo. Lo vi veinticinco veces por televisión y no hay dudas de que la pelota no salió”, reclamó Quinteros. “Un línea con vista biónica nos anuló el gol”, ironizó, y concluyó: “No tengo duda de que no hubiera levantado nunca la bandera en caso de que fuera para Brasil”. Dunga, por su parte, sostuvo que “yo no puedo decir si la pelota salió o no porque estaba muy lejos y desde mi posición es difícil saberlo”. Sin embargo, le dio la derecha al árbitro y al línea porque “los jugadores que estaban más cerca dijeron que la pelota salió” del campo de juego, antes que Miller Bolaños enviara un centro que al arquero Alisson se le escurrió de las manos en el primer palo.