El juez Mariano Bergés ordenó la detención del secretario general de Boca, Luis Buzio, y de cinco presuntos barrabravas, uno de ellos el conocido Santiago “Gitano” Lancry, por supuestos manejos irregulares en la entrega de entradas para el superclásico. Otras siete personas fueron detenidas para establecer su identidad cuando intentaron ingresar a la tribuna de River con entradas falsas, minutos antes de la hora de inicio del partido. El total de los detenidos ascendió a 29.