River tardó sólo diez minutos en reencontrarse con la victoria, luego del traspié sufrido ante Estudiantes, que casi sentenció sus posibilidades en este torneo Apertura. Ese fue el tiempo en el que consiguió los dos goles para vencer a Gimnasia, al comienzo del segundo tiempo. En el primero, Gallardo remató desde afuera del área, y la pelota ingresó al lado del palo luego de rozar en San Esteban. Eso provocó que el arquero Kletnicki quedara descolocado. El segundo gol fue tres minutos más tarde, cuando Higuaín le pegó de zurda a la pelota para ubicarla al lado del palo izquierdo del arquero. La acción se inició con una tapada de Kletnicki ante Farías.

El encuentro comenzó con el dominio de River a través de Gallardo, quien lentamente fue convirtiéndose en el jugador más destacado del partido. De todas maneras, el local no podía marcar diferencias en el resultado, debido a que el arquero visitante respondía con acierto cada vez que tenía que intervenir. Recién en el final de la primera etapa River tuvo una de las chances más claras, pero Basualdo rechazó sobre la línea un tiro de Nasuti. Gimnasia había tenido su mejor oportunidad a los 26 minutos, cuando Cabrera estrelló una pelota en el palo derecho de Carrizo.

Como River definió todo rápidamente en el inicio del segundo tiempo, el resto del partido no ofreció demasiadas emociones, y sólo evidenció las dificultades que tiene River para definir sus ataques. El ingreso de Ortega en los últimos 15 minutos provocó el entusiasmo de la gente, pero el jujeño todavía está en busca de su mejor nivel, e incluso fue amonestado por simular una falta dentro del área rival. El triunfo ya estaba asegurado, pero el festejo final no fue de los más representativos.