Jonatan Castellano ganó en Rafaela, pero la carrera no terminó allí: su “Naranja Mecánica” será exhibida desde hoy y hasta mañana, junto al resto de los autos clasificados en las carreras de TC y TC Pista en el óvalo santafesino, en un parque cerrado dispuesto en la avenida 9 de Julio, esquina México, desde donde los pilotos protagonizarán mañana el Gran Premio del Bicentenario.

Mañana al mediodía, los autos abandonarán el parque cerrado para dirigirse hacia el Obelisco. Allí, desde las 14, se pondrá en marcha la exhibición, largándose en tandas de dos autos cada diez segundos, a la usanza del TC tradicional. En la presentación del Gran Premio, el ministro del Interior, Florencio Randazzo (que no se pierde una carrera de TC y simpatiza con Ford), afirmó que será la presidenta Cristina Fernández de Kirchner quien baje la bandera de largada en uno de los actos más deportivos de la celebración del Bicentenario.

El itinerario previsto luego de la largada será desde la avenida 9 de Julio, pasando por Libertador, Figueroa Alcorta, Puente Echeverría, Cantilo, General Paz y bajada en avenida Maipú, para detenerse en la estación del Tren de la Costa y luego estacionarse en 45 grados frente a la Municipalidad de Vicente López, tras la finalización de la primera etapa. Posteriormente continuarán hasta Santa Fe y Edison, en San Isidro, donde finalizará la competencia con la reproducción del podio de ambas categorías.

Los autos irán encabezados por el pace-car a una velocidad que oscilará los 90 kilómetros por hora, contando además con la participación de unidades que integraron los 73 años de vida del Turismo Carretera, entre otras las de Angel Lo Valvo, los hermanos Juan y Oscar Gálvez, Juan Manuel Fangio, los hermanos Emiliozzi, Jorge Cupeiro, Carlos Pairetti, Octavio Suárez y Roberto Mouras.

En la prueba simbólica, los autos podrán usar motores de reserva, teniendo en cuenta que la verificación técnica definitiva de la carrera se realizó en Rafaela y no en San Isidro, como se había anunciado en un comienzo.