Un solo tiempo
- El trabajo de la línea de volantes de Vélez fue tremendamente superior a la del rival, y allí radicó la clave de la victoria, que fue tan merecida como indiscutible.
- En cambio, el tamaño de la goleada hay que atribuírselo a la eficacia de los delanteros velezanos, que aprovecharon a la perfección sus chances.
- Central nunca pudo reaccionar. Cuando llegó por primera vez al arco de Sessa, ya perdía 2-0.
- El segundo tiempo fue, simplemente, una cuestión formal. Vélez se paró para contragolpear, y logró así el quinto tanto. El descuento no cambió nada.