Silva va del ring a los Tribunales
Por D.G.
Tiende a complicarse la situación judicial de Ricardo “Kojak” Silva. A raíz de sus declaraciones luego de la pelea que se le dio por perdida el sábado 3 de marzo ante Alberto Sicurella, el ex campeón argentino y todavía campeón sudamericano de los livianos no sólo será demandado por calumnias e injurias por el presidente de la Federación Argentina de Box, Osvaldo Bisbal, sino que también podría recibir pleitos de parte del resto de los integrantes del cuerpo directivo de la FAB.
Silva deberá presentarse el próximo lunes 18 de marzo ante el Tribunal de Disciplina para efectuar el correspondiente descargo. Y se especula con que la sanción que recibirá será durísima: no menos de seis meses de suspensión y la pérdida de su título sudamericano. Hay antecedentes en la materia: por haber pateado en el piso a Walter Masseroni el 6 de octubre de 2000 en Córdoba, Moli perdió los campeonatos argentino y sudamericano de los pesados y hasta el Latino de la OMB y debió pasar seis meses de forzada inactividad.
Pero esta pena (que podría incluir hasta el retiro de la licencia de boxeador) sería independiente de los juicios que recibiría Silva por sus dichos. En la semana, el rapado evangelista de 39 años ratificó acusaciones de presunta corrupción para dirigentes y jurados y dijo entre otras cosas que le ofrecieron 5000 dólares para dejarse perder contra Walter Crücce y que Alberto Zacarías, entrenador y manager de Sicurella, contrató barras bravas de San Telmo para ejercer presión contra los jueces. Bisbal y el resto de los miembros de la FAB exigirían una pública retractación de Silva como condición indispensable para no iniciar los procesos.