Jueves, 7 de mayo de 2009 | Hoy
Si creías que la pintura, el pincel y el aerosol eran más seguros que la guitarra eléctrica, no te equivoques: la Justicia bonaerense dictaminó que pintar un graffiti en la pared o persiana de una propiedad privada constituye un delito, y puede conllevar penas de entre 15 días y un año de cárcel. El argumento es que las pintadas implican un daño para el edificio-banda-soporte. Hay seis jóvenes imputados. ¿Se terminan la impunidad aerosolera y la inseguridad mural?
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.